Los molinos de viento manchegos son estructuras que convierten la energía eólica en energía rotacional para moler granos. Estos molinos tienen una rica historia que se remonta al siglo II y se han utilizado en diversas regiones del mundo, como Persia, Europa y África. La construcción típica de los molinos de viento en España consiste en una base circular de piedra sobre la cual se apoya una parte superior independiente de madera que sostiene las aspas.
En la literatura, los molinos de viento se han vuelto símbolos icónicos gracias a la obra de Miguel de Cervantes, «Don Quijote de la Mancha». Los molinos de viento han sido utilizados para diversos propósitos a lo largo de la historia, como la extracción de agua y la generación de electricidad. Aunque actualmente muchas de estas estructuras se conservan por su valor histórico, algunas todavía funcionan comercialmente.
Para construir un molino de viento manchego, se requiere una base sólida, un entramado de madera que pueda girar sobre el tambor de piedra, un sistema de engranajes y aspas. Las aspas deben ser ajustables para controlar la cantidad de viento que reciben y orientarse según la dirección del viento. En algunos casos, se utilizan lonas en lugar de aspas, las cuales se enrollan cuando no se requiere movimiento.
Construir un molino de viento
Construir un molino de viento de Castilla-La Mancha requiere de habilidades y herramientas especializadas. Además, es importante tener en cuenta que construir un molino de viento puede ser peligroso y debe realizarse bajo la supervisión de un profesional cualificado. A continuación se detallan los pasos generales que se deben seguir para construir un molino de viento de Castilla-La Mancha:
- Selección del lugar: Elige un lugar con buen flujo de viento, preferiblemente en una colina o área elevada.
- Diseño: Estudia el diseño tradicional de los molinos de viento manchegos, que suelen ser de forma cilíndrica o troncocónica, con una base circular de piedra y una parte superior de madera que sostiene las aspas.
- Materiales: Reúne los materiales necesarios, como piedra para la base, madera para la parte superior y las aspas, engranajes y otros componentes mecánicos.
- Construcción de la base: Construye la base circular de piedra, asegurándote de que sea sólida y estable para soportar la estructura completa.
- Construcción de la parte superior: Construye la parte superior de madera, que servirá como cubierta y soporte para las aspas. Asegúrate de que esta parte pueda girar sobre la base para orientar las aspas según la dirección del viento.
- Aspas: Construye las aspas de madera y asegúralas a la parte superior de la estructura. Coloca lonas en las aspas para atrapar el viento.
- Mecanismos internos: Instala el engranaje (linterna) que engrana con una rueda horizontal (catalina) para transmitir el movimiento del eje de las aspas a un eje vertical que moverá la maquinaria interna, como una piedra de moler (volandera).
- Sistema de orientación: Instala un largo madero (gobierno) fijo a la cubierta y exterior al edificio, que permita girar la parte superior de la estructura para orientar las aspas según la dirección del viento.
- Ventanucos: Asegúrate de incluir ventanucos en la parte superior del edificio para que el molinero pueda monitorear los cambios en la dirección del viento.
Una vez que hayas construido tu molino de viento manchego, podrás utilizarlo para moler granos o aprovechar su energía mecánica para otros fines, como bombear agua.
¿Cuándo se construyó el primer molino de viento?
Es difícil determinar con precisión cuándo se construyó el primer molino de viento, ya que su invención y desarrollo ocurrieron gradualmente a lo largo del tiempo. Sin embargo, se cree que los primeros molinos de viento fueron construidos alrededor del siglo VII en Sistán, una región que se encuentra actualmente en la frontera entre Afganistán e Irán. Estos primeros molinos de viento se conocían como «molinos de viento persas» o «molinos de viento de eje vertical».
Estos molinos de viento persas tenían una serie de aspas verticales montadas en un eje central y estaban rodeados por una estructura de paredes parcialmente abiertas. El viento soplaba a través de las aberturas, empujando las aspas y generando energía mecánica que se utilizaba para moler granos o bombear agua.
Con el tiempo, los molinos de viento se difundieron a otras partes del mundo, incluida Europa, donde se desarrollaron los molinos de viento de eje horizontal, como los molinos de viento manchegos en España y los molinos de viento holandeses en los Países Bajos. Estos molinos de viento evolucionaron a lo largo de los siglos, adaptándose a las necesidades locales y a las condiciones geográficas y climáticas específicas.
¿Dónde podemos ver molinos de viento?
Los molinos de viento de Castilla-La Mancha son un elemento característico de la región y se pueden encontrar en diferentes lugares de Castilla-La Mancha. Algunos lugares destacados donde se pueden ver molinos de viento de Castilla-La Mancha son:
- Consuegra: Esta localidad alberga un conjunto de 12 molinos de viento manchegos en la llamada «Ruta de los Molinos», que se alzan en una colina con vistas al pueblo y al castillo medieval de Consuegra.
- Campo de Criptana: Aquí puedes encontrar un conjunto de molinos de viento en la sierra de los Molinos y el cerro de la Paz, algunos de los cuales han sido restaurados y convertidos en museos.
- Alcázar de San Juan: En esta localidad, hay cuatro molinos de viento ubicados en la llamada «Ruta de Don Quijote». Los molinos, que han sido restaurados y se encuentran en buen estado, ofrecen visitas turísticas y actividades culturales.
- Mota del Cuervo: Este pueblo cuenta con siete molinos de viento en la llamada «Ruta de los Molinos» y uno de ellos, el Molino El Puntal, alberga un pequeño museo donde se muestra la maquinaria original.
- Tomelloso: En esta localidad, se encuentra el Molino de Viento «El Pintado», un molino restaurado que se puede visitar para aprender sobre su historia y funcionamiento.
En general, se pueden encontrar molinos de viento de Castilla-La Mancha en diferentes lugares, también Herencia, Alcázar de San Juan, etc.