Movistar Inter mostró su calidad y superioridad en el enfrentamiento de la Copa del Rey al vencer de manera contundente a Viña Albali Valdepeñas por un abultado 3-5. Desde el principio del encuentro, el equipo madrileño dejó claro su objetivo, con un gol inicial de Cecilio que encendió la llama del partido. Chaguinha ampliaría la ventaja apenas después, estableciendo un ritmo que el conjunto rival no pudo seguir.
La primera parte fue un auténtico derroche de eficacia por parte de Movistar. Mínguez, Drahovský y Barona se unieron a la fiesta goleadora, llevando el marcador a un aplastante 0-5 antes del descanso. Un resultado que evidenciaba no solo la superioridad en el marcador, sino también el control del juego que ejercía Movistar en cada rincón de la pista del estadio Virgen de la Cabeza.
Aunque la segunda mitad no alteró significativamente la dinámica del juego, Movistar continuó su asedio. Raya marcó el sexto gol y selló una ventaja que parecía inalcanzable para los locales. Sin embardo, Valdepeñas no se rindió y, en un intento de recuperar el orgullo perdido, se lanzó al ataque en los minutos finales. Este esfuerzo culminó en tres goles que, aunque algo tardíos, le otorgaron un matiz menos doloroso al marcador final.
El ambiente en el estadio, que había comenzado vibrante y esperanzado por la actuación de Valdepeñas, dio paso a la frustración conforme avanzaba el partido. La ilusión de un buen desempeño se desvaneció, y lo que prometía ser una noche emocionante terminó convirtiéndose en una dura lección para los locales. Mientras tanto, Movistar Inter avanza con paso firme en la Copa, consolidándose como uno de los favoritos al título y demostrando su capacidad para dominar en los momentos cruciales.
