Durante los entrenamientos rutinarios del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de Castilla-La Mancha, basado en la Comandancia de la Guardia Civil de Cuenca, se realizó un descubrimiento inesperado en el embalse de Contreras, conocido como ‘El Embarcadero’. Los buceadores localizaron una granada de mortero ECIA de 81 mm, que estaba intacta con todos sus componentes.
Ante el hallazgo de este artefacto explosivo, los buceadores actuaron con celeridad, señalizando y acordonando la zona para garantizar la seguridad de los ciudadanos. La situación llevó a la activación del Grupo Mixto de Desactivación Subacuática de la Guardia Civil, que tiene su sede en Valdemoro, Madrid, para realizar la neutralización de la granada.
Este grupo está formado por buceadores especializados de la Unidad Especial de Actividades Subacuáticas (UAS) y técnicos en desactivación de artefactos explosivos y NRBQ (TEDAX NRBQ), quienes pertenecen al Servicio de Desactivación de Explosivos y Defensa NRBQ (SEDEX NRBQ).
Al llegar al lugar del incidente, se llevó a cabo una reunión de coordinación entre todas las unidades implicadas, donde se revisaron las medidas de seguridad implementadas. Estas medidas incluyeron el acordonamiento de la zona y la vigilancia continua por parte de las patrullas de Seguridad Ciudadana. Asimismo, se estableció un operativo que permitió a los especialistas actuar de manera segura y con mínimo impacto ambiental.
La Guardia Civil hizo hincapié en la importancia y efectividad de los protocolos seguidos en circunstancias de este tipo a través de una nota de prensa. Este incidente resalta la labor de los cuerpos de seguridad en la gestión y neutralización de amenazas potenciales en el medio ambiente, asegurando la tranquilidad de la población local.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
