Un equipo de investigadores del Hospital Nacional de Parapléjicos, centro dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), ha logrado un importante avance en el campo de la terapia celular para personas con esclerosis múltiple. Gracias a unos nuevos dispositivos de cultivo celular basados en óxido de grafeno, han conseguido mantener la función antiinflamatoria de las células mieloides supresoras (MDSCs) una vez aisladas del organismo donante.
El estudio, publicado en la revista científica Nanoscale, ha sido llevado a cabo por el laboratorio de Neuroinmuno-Reparación del Hospital de Parapléjicos en colaboración con el Instituto de Ciencia de Materiales de Madrid del CSIC (ICMM-CSIC). Según explicó el director de la investigación, Diego Clemente, las células mieloides supresoras deben estar en un estado muy inmaduro para ejercer su función de control de la inflamación en enfermedades como la esclerosis múltiple. Sin embargo, al ser extraídas y cultivadas en el laboratorio, suelen madurar rápidamente, perdiendo su actividad inmunosupresora.
Es en este punto donde juega un papel crucial la tecnología de los dispositivos basados en óxido de grafeno desarrollados por el equipo de investigadores. Estos dispositivos permiten mantener las células en un estado morfológico, de maduración y de actividad similar al que presentan en el organismo de origen, lo que potencia su función de control de la inflamación y las convierte en un potencial soporte tecnológico para una terapia celular en la esclerosis múltiple.
Los nanomateriales derivados del grafeno están siendo cada vez más estudiados para aplicaciones biomédicas, y el óxido de grafeno destaca por su versatilidad. La codirectora de la investigación, Concepción Serrano, destacó que la modificación físico-química de este nanomaterial puede tener efectos biológicos específicos sobre las células mieloides supresoras, manteniendo su viabilidad celular o induciendo su muerte.
Este estudio pionero demuestra el potencial de los nanomateriales basados en grafeno como herramientas nanotecnológicas para la modificación de las células mieloides supresoras en diversas enfermedades, como las autoinmunes y el cáncer. El trabajo, en el que participaron investigadores como la doctora Celia Camacho Toledano, se enmarca en los esfuerzos colaborativos de la Unidad Asociada Diseño y Desarrollo de Biomateriales para Regeneración Neural entre el Hospital Nacional de Parapléjicos y el CSIC, creado en 2017.
Este avance abre nuevas posibilidades en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas como la esclerosis múltiple, demostrando una vez más el potencial de la investigación científica para mejorar la calidad de vida de los pacientes. La innovación en terapia celular utilizando estos dispositivos basados en óxido de grafeno promete ser un gran paso hacia el desarrollo de tratamientos más efectivos y personalizados para pacientes con esclerosis múltiple.
Fuente: Diario de Castilla-la Mancha.
Consulta más Noticias de Castilla-La Mancha, Noticias Ciudad Real, Noticias Toledo o Noticias de Cuenca.