El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha manifestado su satisfacción tras una reciente sentencia del Tribunal Supremo que destaca la importancia de implementar medidas para garantizar un mayor caudal ecológico en el río Tajo, especialmente en su trayecto por la provincia de Toledo. En declaraciones desde Bruselas, el líder regional consideró que esta decisión del Alto Tribunal es un paso adelante significativo para la región y está en línea con sus pronunciamientos anteriores.
García-Page calificó la sentencia como una victoria para Castilla-La Mancha, labor que ha requerido un considerable esfuerzo y tiempo. Según su opinión, el Supremo ha dejado claro que es imprescindible cumplir con los caudales ecológicos establecidos, subrayando que «ya no valen subterfugios ni ambigüedades», y enfatizando que «se necesitan caudales ecológicos y, además, con urgencia».
Además, el presidente aseguró que esta nueva decisión judicial «blinda una posición irreversible», indicando que «el trasvase es historia tal y como se considera». En este nuevo contexto, abogó por el uso de agua desalada para la zona del Levante, afirmando que es crucial avanzar en esa dirección.
En el ámbito político, García-Page aprovechó para criticar al Partido Popular (PP) en Castilla-La Mancha, tras el apoyo de sus diputados nacionales a retomar las normas de 2014 sobre trasvases. Les recordó la necesidad de «conocer mejor a su tierra» y adoptar una postura coherente en defensa de los intereses de la región. Expresó su decepción por la unión de los PP de Murcia y Castilla-La Mancha en favor de propuestas que considera perjudiciales para su propio territorio.
Finalmente, el presidente reflexionó sobre la validez de los acuerdos firmados en relación al agua, preguntándose sobre la verdadera importancia que algunos les otorgan: «Es evidente que a algunos esos documentos les damos mucha importancia y para otros es simplemente una coartada», concluyó.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
