Durante el Debate del Estado de la Región, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, no dudó en responder a las críticas vertidas por el portavoz de Vox, David Moreno. García-Page cuestionó la falta de reconocimiento hacia la gestión del Gobierno regional y enfatizó que la postura de Vox sugiere que «necesitan que todo vaya mal». En su intervención, argumentó que el partido de Moreno confunde «la realidad con su deseo», lo cual consideró parte de una estrategia política marcada por la demagogia y el populismo.
El presidente regional también hizo uso de la ironía al aludir a las críticas sobre su actuación en las Cortes de Castilla-La Mancha, insinuando que Moreno defendía los parlamentos autonómicos de manera contradictoria. En este contexto, García-Page destacó la gestión fiscal de la región, señalando que Castilla-La Mancha se encuentra entre las comunidades autónomas que más ha logrado reducir el crecimiento de su deuda, fijándolo en un 2,5%. En contraposición, hizo referencia al aumento del 17% en la deuda municipal del Ayuntamiento de Talavera de la Reina, donde Moreno ocupa la Vicealcaldía.
Además, García-Page abordó las acusaciones sobre su supuesta complicidad con la inmigración ilegal. Afirmó que es un tema que debe ser tratado «con bastante tranquilidad y bastante humanidad». Subrayó la importancia de evitar la hipocresía y el cinismo en cuestiones relacionadas con los derechos humanos y reafirmó su compromiso con un enfoque más humanitario en este asunto. La reunión se convirtió, así, en un punto de confrontación entre la gestión del gobierno autonómico y las opiniones del principal partido de la oposición.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
