El portavoz del Grupo Socialista en la Diputación, José Manuel Bolaños, ha abordado la reciente renuncia del diputado de Vox, Luis Alberto Marín, afirmando que esta situación es un claro reflejo de la crisis y desorganización persistente en la institución provincial. Bolaños ha señalado que la responsabilidad de esta crisis recae directamente sobre Miguel Ángel Valverde y el Partido Popular, a quien ha criticado por su gestión al frente de la Diputación.
Según el portavoz del PSOE, Valverde ha intentado mantener su cargo “a toda costa”, con el resultado de crear una Diputación “inestable y sin rumbo”. Desde el inicio del pacto entre el PP y Vox, Bolaños sostiene que ha sido evidente que existe un mal funcionamiento del mismo, lo que ha derivado en una notable crisis de gobierno.
Bolaños ha presentado ejemplos concretos para ilustrar su argumentación, citando el derroche de recursos en eventos como la carpa de “Sabores del Quijote” en Fenavin. También ha criticado el abandono de políticas de memoria democrática, así como la eliminación de actividades relacionadas con el Día del Orgullo LGTBI y la supresión de premios vinculados a la lucha contra la violencia de género. Además, ha expresado su preocupación por la decisión de ceder la dirección de un medio público, Lanza, a un director con una trayectoria política controvertida.
El portavoz socialista ha denunciado que el Partido Popular ha transformado la Diputación en un “cortijo al servicio de la derecha extrema”, desatendiendo su verdadera función de servir a los pueblos. Bolaños ha reiterado su advertencia sobre las consecuencias negativas que tendrá este pacto para la provincia, subrayando que la ambición de Valverde por mantener el poder está afectando los intereses de los ciudadanos.
Finalmente, Bolaños ha remarcado que la renuncia de Marín, junto con la incertidumbre sobre su sucesor, evidencia la fragilidad del actual equipo de Gobierno, sugiriendo la posibilidad de que recurran a un concejal de Vox que ya había roto un pacto en su ayuntamiento. Ha concluido su intervención lamentando que esta situación perpetuará la crisis de la institución hasta el final de la legislatura, lo que podría traducirse en “cuatro años perdidos” y un retroceso para la provincia, todo ello por el intento de Valverde de aferrarse al poder.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
