La etapa de Raúl González como entrenador del Castilla del Real Madrid concluyó el pasado verano, tras dedicarse años a formar talentos en las categorías inferiores. Su decisión de dejar el club se intensificó con la llegada de Xabi Alonso, lo que lo llevó a buscar un desafío mayor. A pesar de recibir varias ofertas, Raúl prefiere esperar una oportunidad que realmente lo entusiasme.
Con el inicio de la nueva temporada, Raúl se halla en una posición expectante. Equipos como el Girona FC y el RCD Mallorca parecen ser opciones viables, ya que ambos clubes han tenido comienzos de temporada poco prometedores. La presión sobre sus actuales entrenadores, Míchel y Jagoba Arrasate, podría abrirles las puertas a nuevas posibilidades, y la experiencia de Raúl en la adaptación a jugadores en dificultades podría ser clave en este contexto.
Además, la Real Sociedad se encuentra en una situación delicada bajo la dirección de Sergio Francisco, quien enfrenta un inicio de temporada flojo. A pesar de que la directiva aún respalda su proyecto, los resultados serán determinantes para su permanencia. En este entorno, Raúl González se posiciona como una alternativa atractiva, dada su trayectoria y habilidad para liderar grupos, lo que podría generar expectativas positivas sobre su próximo rumbo profesional.