Toledo ha alcanzado un nuevo hito en su historia laboral con el cierre de un junio que ha dejado cifras récord en el mercado de trabajo. Por primera vez en 17 años, el número de desempleados en Castilla-La Mancha ha bajado de los 120.000, situándose en 118.917 parados, lo que representa una disminución de 4.201 personas en un solo mes y de 4.177 en el último año. Este descenso ha sido muy bien recibido por la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco.
La consejera se mostró optimista sobre la situación y destacó que “es un mes con una estacionalidad positiva que, en este caso, se refleja en datos históricos”. Franco agregó que la caída del paro ha sido continua durante cuatro meses y que este descenso afecta a todos los grupos demográficos y sectores económicos, beneficiando tanto a hombres como a mujeres.
En otro aspecto positivo, Castilla-La Mancha se consolida como la segunda comunidad autónoma que más empleo ha generado en junio, detrás de Baleares. La afiliación a la Seguridad Social ha superado notablemente las 800.000 personas, estableciendo así un récord en la región. En total, se han creado 13.829 nuevos empleos en el último mes, lo que equivale a un incremento del 1,68 %.
La consejera subrayó que esta expansión del empleo no se limita a los sectores tradicionales. La industria, el comercio, los servicios administrativos y el sector sanitario han mostrado desempeños sobresalientes en la creación de empleo, con la industria generando 1.634 nuevos puestos de trabajo.
También es importante mencionar el aumento en la actividad autónoma, que ha alcanzado los 150.300 trabajadores por cuenta propia en Castilla-La Mancha. Además, el 43 % de los contratos firmados en junio han sido indefinidos, superando así la media nacional.
Franco afirmó que seguirán implementando políticas efectivas de empleo y formación para mantener esta tendencia positiva. A medida que se aproxima el décimo aniversario de la llegada del presidente García-Page al Gobierno, estos datos evidencian un compromiso sólido hacia la creación de empleo de calidad y la reducción del desempleo en la región. Desde el inicio de su mandato, se han creado más de 166.000 nuevos empleos, representando aproximadamente el 26 % del total actual de empleo en Castilla-La Mancha.
Estos avances no solo mejoran las condiciones económicas en la región, sino que también sientan las bases para un futuro laboral más sólido y esperanzador.