El Gobierno regional ha revelado su plan para emprender un ambicioso proyecto de restauración integral en el valle del espacio protegido Refugio de Fauna de Hazadillas y Era Vieja, con un presupuesto asignado de 490.000 euros. La iniciativa fue presentada por el vicepresidente segundo, José Manuel Caballero, junto a la consejera de Desarrollo Sostenible, Mercedes Gómez, y tiene como objetivo la ampliación del Parque Natural de las Lagunas de Ruidera.
Caballero destacó que la inversión total destinada a la conservación medioambiental, la mejora de la accesibilidad y la promoción patrimonial del Parque Natural supera los 1,8 millones de euros. Además del proyecto de restauración del valle kárstico de las Hazadillas, esta suma abarca otras acciones complementarias, como la musealización del Centro Cultural de Reserva de la Biosfera de la Mancha Húmeda y la eliminación de estructuras en mal estado dentro del parque.
Mercedes Gómez puntualizó que el proyecto, financiado mediante fondos MRR para la restauración de humedales, tiene un plazo de ejecución de dos años. Se prevé que la primera fase comience en octubre y finalice en primavera de 2025, seguida de un período de seguimiento que se extenderá hasta finales de 2026.
La consejera de Desarrollo Sostenible destacó que el objetivo central de esta restauración es mejorar la naturalidad del valle, que ha sufrido un considerable deterioro debido a un canal de drenaje creado en la década de 1960, afectando negativamente a sus hábitats y especies. Las acciones que se llevarán a cabo permitirán la recuperación de hábitats frágiles, el retorno de especies amenazadas, la restauración de la dinámica natural del arroyo y la erradicación de especies exóticas como los chopos.
Este proyecto es crucial también para la ampliación del parque natural, ya que la finca en cuestión, contigua al Parque, no integra en su totalidad sus 1.984,02 hectáreas. Con la inclusión de esta área, se prevé que el espacio protegido aumente de 3.772 hectáreas a 5.180.
Desde el Ejecutivo se ha enfatizado que la finca alberga recursos naturales de gran valor, tanto geomorfológicos como bióticos. Entre su rica biodiversidad se encuentran especies amenazadas como el gato montés, el iberón, la garduña y diversas rapaces forestales, así como vegetación autóctona representada por sabinares y encinares.
vía: Diario de Castilla-La Mancha