En una resolución inesperada, un juzgado de Zaragoza ha declarado nula una deuda de 3,500 euros debido a la falta de transparencia en el contrato de una tarjeta revolving. Este tipo de tarjetas, con altos intereses, ha sido objeto de múltiples reclamaciones por parte de consumidores en los últimos años.
La cliente, con bajos ingresos, recurrió al servicio de turno de oficio para obtener ayuda legal gratuita y fue defendida por el abogado Luis Tomás Ortega. El juez declaró la tarjeta abusiva por el tamaño de la letra del contrato, considerando que no cumplía con los requisitos de claridad y transparencia necesarios.
La importancia de la transparencia en los contratos financieros queda resaltada con esta sentencia, que establece un precedente en la protección de los derechos de los consumidores. La ironía utilizada por el juez al describir la letra del contrato destaca la necesidad de cumplir con los estándares de transparencia para proteger a los consumidores.