En una entrevista concedida al digital ManchaMEDIA, Rosa Melchor ha recordado que el decreto del estado de alarma “me pilló trabajando” porque desde hacía días iban llegando datos que apuntaban esa posibilidad, de hecho el día 12 de marzo, recordaba, ya se tomaron medidas como el cierre de algunas instalaciones municipales.
Desde el primer día del confinamiento, el gobierno municipal se puso a trabajar en reuniones telemáticas para coordinar el trabajo, “a modo de gabinete de crisis”, recuerda la alcaldesa. Entre las primeras decisiones figura la atención a los más vulnerables, mayores de 65 años que vivían solos para llevarles medicación o alimentos a sus domicilios, reparto de equipos telemáticos a familias sin recursos para que pudieran seguir las clases online, colaboramos con el gobierno regional en la búsqueda de EPIS o camas de hospitalización, de alojamiento para sanitarios, etc.
Fueron unos días muy duros para todos, rememora, “para mí fue durísimo no poder permitirme un momento de debilidad para hacer frente a todas las responsabilidades porque cada día amanecíamos sabiendo del fallecimiento de vecinos, amigos o familiares; era nuestra gente la que fallecía en una situación sobrevenida”.
Con la entrada del verano llegó la apertura de la hostelería, comercios, celebración de actividades culturales o deportivas con estrictas medidas de seguridad, pero lo que se llamó “nueva normalidad” considera la alcaldesa, fue un espejismo “por la necesidad de tener la sensación de que había pasado lo peor, pero no fue así”. A las puertas de la cuarta ola según los expertos, “es el momento de aprender de nuestros errores y ser conscientes de que la podemos evitar” si bien afrontamos la situación de pandemia en “un momento de esperanza” con el desarrollo de la campaña de vacunación.
La alcaldesa de Alcázar de San Juan, ha recordado que el ayuntamiento ha puesto a disposición de las autoridades sanitarias las instalaciones municipales que requiera para seguir desarrollando el proceso de vacunación y finalmente será el Pabellón Vicente Paniagua el punto centralizado de vacunación “por su gran capacidad, su fácil acceso y la amplia zona de aparcamiento”.