Un total de 75 familias que residían en la Comandancia de la Guardia Civil de Toledo han comenzado su reubicación en nuevos domicilios de manera normalizada. Este cambio representa uno de los primeros pasos para desalojar el actual emplazamiento, con el objetivo de iniciar la futura renovación de las instalaciones de la Benemérita en la ciudad.
La delegada del Gobierno en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, confirmó esta información en una rueda de prensa celebrada este jueves en la misma comandancia, donde estuvo acompañada por el jefe interino de la Guardia Civil en Toledo, el coronel José María Gil. En esta comparecencia, se ofrecieron detalles sobre la situación del desalojo y los planes futuros.
En relación a los plazos para el desalojo total del inmueble, Tolón mencionó que este proceso podría completarse en junio. Por su parte, el coronel Gil aclaró que estos cronogramas dependen de las recomendaciones de los técnicos de la Dirección General de la Guardia Civil. Actualmente, se están elaborando informes técnicos sobre los bloques de pisos que ya han sido desalojados, y un cronograma definitivo para el resto de las dependencias se planteará conforme a las directrices de los especialistas involucrados.
La delegada subrayó la importancia de trabajar de manera coordinada desde un enfoque técnico para asegurar que el proceso se desarrolle con la máxima normalidad. Insistió en la colaboración existente entre la Dirección General de la Guardia Civil y la jefatura de zona, lo que facilitará una transición ordenada.
Tolón también abordó la controversia surgida en torno al terreno en la Peraleda, que había sido considerado para la construcción de un nuevo cuartel, pero que finalmente ha sido devuelto al Ayuntamiento de Toledo. La delegada expresó su percepción de que, desde el comienzo del proceso, ha existido una falta de «voluntad política» por parte del Consistorio para colaborar con la Guardia Civil en este tema. Afirmó que hay otras parcelas disponibles en la Peraleda, cercanas a la que fue restituida, que podrían haber sido cedidas, lo que evidenciaría, a su juicio, una escasa disposición del Ayuntamiento para apoyar a la institución.
La situación se encuentra en desarrollo y los próximos pasos serán determinantes para el futuro de la Guardia Civil en Toledo y para las familias que, tras años de espera, han iniciado una nueva etapa en sus vidas.
vía: Diario de Castilla-La Mancha