Toledo, 15 de noviembre de 2025.- Este verano ha dejado un saldo trágico en la región de Castilla-La Mancha, donde siete personas han perdido la vida en accidentes acuáticos ocurridos tanto en piscinas como en zonas naturales de baño. La participación del Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 1-1-2, dependiente de la Consejería de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, ha sido clave en la atención y gestión de estos incidentes.
A pesar de que los fallecimientos son la faceta más dolorosa de esta problemática, se han reportado un total de 18 accidentes en los que el 1-1-2 ha coordinado la intervención de distintos cuerpos de emergencia, incluidos bomberos, personal sanitario, Cruz Roja y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
De los siete casos fatales, cuatro tuvieron lugar en piscinas y tres en entornos naturales acuáticos. El primer incidente mortal se registró el 29 de junio en el río Bullaque, en Porzuna (Ciudad Real), donde un joven de 29 años perdió la vida. En julio, un hombre de 50 años falleció en el embalse de Entrepeñas, en Pareja (Guadalajara), y al día siguiente, otro hombre de 42 años fue hallado sin vida en el parque fluvial de Zorita de los Canes (Guadalajara).
En cuanto a los accidentes en piscinas, el primero se reportó el 8 de agosto en La Villa de Don Fadrique (Toledo), donde un hombre de 89 años perdió la vida. A finales de agosto, un hombre de 40 años fue encontrado inconsciente en una piscina de La Poblachuela (Ciudad Real) y, pese a los esfuerzos realizados, no se pudo salvar su vida. Otras tragedias se sumaron con la muerte de un joven de 24 años en Mora (Toledo), que sufrió un golpe en la cabeza al zambullirse, y un hombre de 80 años en Puerto Rey (Toledo), quien fue encontrado en estado de inconsciencia el 5 de octubre.
La mayoría de los accidentes, 14 de los 18 registrados, ocurrieron en piscinas, mientras que solo cuatro tuvieron lugar en espacios de baño naturales. Los meses de junio y julio fueron los más críticos, con seis incidentes cada uno, sumando un total de 12. Agosto y septiembre también presentaron cifras alarmantes, con tres y dos casos respectivamente, y octubre cerró con un único accidente.
La serie de tragedias durante el verano pone de manifiesto la necesidad urgente de reforzar la seguridad en espacios acuáticos. Expertos insisten en que es fundamental implementar medidas de vigilancia y prevención para evitar que el próximo verano se repita esta dolorosa estadística.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
