La Red Europea de lucha contra la Pobreza y/o Exclusión Social (EAPN) en Castilla-La Mancha ha hecho un llamado al Gobierno regional para que reactive el Ingreso Mínimo de Solidaridad, mientras se trabaja en la mejora del acceso al Ingreso Mínimo Vital (IMV). Esta medida busca ofrecer un salvaguarda a las personas que se encuentran en riesgo de pobreza y exclusión social en la región. Durante un acto institucional celebrado en conmemoración del Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza, Mar González, presidenta de EAPN a nivel regional, compartió la alarmante cifra de 660.000 personas en situación de vulnerabilidad en Castilla-La Mancha, lo que representa un incremento de 10.000 en comparación con 2022. González también destacó que la pobreza severa ha aumentado, pasando del 8,7% al 10,4% en 2023, afectando a aquellos que subsisten con menos de 611 euros al mes.
En el evento, que tuvo lugar en las Cortes regionales, se escucharon las voces de varios representantes de organizaciones sociales, quienes pidieron al gobierno un diseño de políticas más efectivas y adaptadas a las necesidades actuales. Oksana Kalashnikova y Daniel Serrano, de la Fundación Ceres, subrayaron la urgencia de establecer redes de seguridad que garanticen el acceso a recursos esenciales como vivienda, salud y educación, así como la importancia de fomentar la colaboración entre diferentes administraciones y el sector privado para desarrollar programas de inserción laboral que promuevan la diversidad.
A su vez, Mercedes Carretón, también de la Fundación Ceres, abogó por la creación de programas de formación profesional que respondan a las necesidades del mercado laboral y de los desempleados. Juan Modesto, de la Asociación Aurelio de León, enfatizó la importancia de digitalizar y simplificar los trámites administrativos. Michel Kakananyo, del Movimiento por la Paz, demandó más incentivos para la contratación de personas desempleadas de larga duración.
Por otra parte, Juan Carlos Vicheria, de Cruz Roja, propuso la implementación de beneficios fiscales para las empresas que contraten a personas con cargas familiares significativas y a mujeres que se encuentran en sectores donde su representación es escasa. Mar González reiteró su convicción de que «nadie se merece vivir ninguna situación de pobreza» y abogó por la continuidad de los planes de empleo en la región, así como por la mejora del Salario Mínimo Profesional para garantizar que las personas con empleo no caigan en la pobreza.
El presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, Pablo Bellido, destacó la relevancia del acto, afirmando que es esencial escuchar y actuar ante la realidad de la pobreza, incluso en un contexto de crecimiento económico. Bellido reconoció que cuestiones como el aumento en el costo de la vida y la dificultad para acceder a una vivienda son obstáculos significativos para muchos trabajadores.
Bárbara García Torijano, consejera de Bienestar Social, enfatizó que el objetivo de la jornada era visibilizar las desigualdades existentes y subrayó que las administraciones deben hacer uso de las herramientas disponibles para mitigar la pobreza y la exclusión social. Anunció la intención de su departamento de aprobar, junto a EAPN y otros sectores, la II Estrategia de lucha contra la pobreza y la desigualdad social en Castilla-La Mancha, con un horizonte que se extiende hasta 2030. García Torijano subrayó que, a pesar de que la tendencia es positiva, la región todavía se sitúa por encima de la media nacional en tasas de riesgo de pobreza y exclusión social.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
