El motociclismo español celebra la llegada de una nueva estrella: Paola Ramos, una joven piloto de 18 años, ha dejado huella en su regreso a la competición con un impresionante segundo puesto en la categoría Yamaha R7 del Campeonato de España de Superbikes (ESBK). Tras cinco años fuera de las pistas debido a la falta de presupuesto, Paola ha vuelto a demostrar su talento y ambición en el mundo del motociclismo.
La actuación de Paola en el Circuit de Barcelona-Catalunya cautivó a todos. Este circuito, conocido por albergar competiciones del Mundial de MotoGP y Superbikes, fue testigo de una pilotaje que combinó limpieza y agresividad. No solo se subió al podio, sino que envió un mensaje claro: está lista para pelear por un lugar en el Mundial.
El contexto de su regreso es particularmente llamativo. Desde sus inicios, Paola mostró destellos de habilidad, pero la falta de apoyo económico la alejó de las pistas durante un lustro. Ahora, respaldada por un grupo de empresarios locales que creen en su potencial, la joven tarraconense busca dejar su marca en el motociclismo.
Tras su destacada actuación, Paola expresó que este logro le da la confianza necesaria para alcanzar sus metas, incluida la de competir en el Mundial femenino de Superbikes. Este objetivo resuena no solo como un deseo personal, sino también como una aspiración compartida por muchos en la comunidad del motociclismo femenino.
En el paddock, los elogios no se han hecho esperar. Técnicos, expilotos y otros equipos recalcan que Paola no es solo una promesa, sino una realidad palpable. Su rapidez para adaptarse a las demandas de la pista y su control emocional han sido claves en su éxito.
Paola Ramos se ha transformado en una figura inspiradora para el motociclismo femenino español, rompiendo barreras de género y edad con su indiscutible talento. Con tres pruebas aún por disputar, ya se encuentra en la segunda posición del campeonato, fortaleciendo su candidatura para el Mundial femenino de Superbikes en 2026.
Con su regreso triunfal, el motociclismo español no solo gana una piloto valiente y veloz, sino también una embajadora para las futuras generaciones de mujeres aspirantes a conquistar el asfalto. Paola Ramos ha vuelto y está dispuesta a cambiar las reglas del juego.