Este miércoles, la Audiencia Provincial de Cuenca llevará a cabo el juicio contra J.S.S., un proceso que ha sido suspendido en dos ocasiones anteriores. El acusado enfrenta una posible condena de 12 años de cárcel por presuntos delitos de agresión sexual y acoso a su expareja. Según fuentes judiciales citadas por Europa Press, la defensa solicitó la suspensión del juicio.
El procedimiento originalmente estaba programado para julio de 2024, pero tras la primera suspensión, se reprogramó para el 12 de marzo de 2025, aunque nuevamente fue cancelado a petición del abogado del acusado.
El escrito de acusación de la fiscalía detalla que J.S.S. mantuvo una relación con la denunciante entre marzo de 2017 y enero de 2018, con varias interrupciones. En un episodio cercano a las navidades de 2017, mientras ambos estaban en la cama del domicilio del acusado, él exigió mantener relaciones sexuales. A pesar de la negativa de ella, quien manifestó no tener ganas en ese momento, J.S.S. la agarró con fuerza y logró mantener relaciones sexuales sin su consentimiento, aunque no se constató que le causara lesiones físicas.
Posteriormente a la ruptura, entre enero y abril de 2018, el acusado continuó contactando de manera insistente a su expareja, llegando a mostrar intenciones suicidas en algunas de las llamadas. A pesar de que la mujer cambió de número telefónico, J.S.S. persistió en su intento de mantener contacto, llegando incluso a comunicarse con el padre de ella y a perseguirla por la ciudad de Cuenca. Esta situación culminó con la denuncia de la mujer por los reiterados y acosadores intentos de contacto.
Los hechos que se imputan al acusado podrían ser considerados como un delito de agresión sexual, conforme a los artículos 178 y 179 del Código Penal vigente al momento de los hechos, así como un delito de acoso según el artículo 172 del mismo código. La fiscalía solicita diez años de cárcel por la agresión sexual y dos años por acoso, además de proponer una orden de alejamiento de hasta 14 años y una indemnización de 5,000 euros por daños morales a la víctima.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
