Este sábado, el Museo Cristina García Rodero fue el escenario del IV Foro de Participación Ciudadana de la Infancia y Juventud de Puertollano, un evento organizado por el Consejo Local de Participación Infantil y Adolescente, que reunió a una veintena de jóvenes representantes de la ciudad. Este encuentro se centró en uno de los derechos prioritarios establecidos por UNICEF para sus foros de participación: los derechos digitales de la infancia y la adolescencia.
A lo largo de la jornada, los jóvenes participantes abordaron diversas cuestiones relacionadas con la seguridad en redes sociales, la protección de la identidad digital, el acceso seguro a la información, la privacidad en Internet y los protocolos de uso de teléfonos móviles en los centros educativos. También se destacó la necesidad de garantizar estos derechos en un contexto donde los entornos digitales forman parte esencial de la vida cotidiana de los niños, niñas y adolescentes.
El foro contó con la presencia del alcalde de Puertollano, Miguel Ángel Ruiz, además de varios representantes del ámbito educativo y de la seguridad, tales como la concejal de Juventud e Infancia, Marian Martín-Albo; la directora del IES Dámaso Alonso, Pilar Coello; el profesor de Informática del IES Virgen de Gracia, Ángel Luis González; el director del colegio Tierno Galván, Carlos Cañizares; el responsable de la Policía Local, Carlos Gijón; el experto en ciberseguridad de la Policía Nacional, Javier Rodríguez; y la concejal Esther Mora.
Durante el desarrollo del encuentro, los jóvenes presentaron un manifiesto en el que expusieron sus principales preocupaciones sobre los riesgos asociados a Internet, como la pérdida de privacidad, la propagación del odio y el engaño. En su declaración, enfatizaron la importancia de asegurar el bienestar y la convivencia en espacios digitales, así como la necesidad de mejorar en cuanto a las medidas actuales, que consideran insuficientes para abordar los problemas reales que enfrentan en el entorno digital.
Los participantes propusieron acciones prácticas que incluyen la mejora de la educación en el uso de Internet, la privacidad y el respeto; el fomento de la inclusión y la aceptación de la diversidad para prevenir situaciones de acoso; y la desestigmatización de la salud mental, especialmente en casos de bullying y acoso en línea.
Entre sus propuestas para los centros educativos, destacaron la creación de la figura del mediador tecnológico, la reducción del uso de las redes sociales en los centros y la implantación de un buzón de sugerencias anónimo para detectar conflictos y mejorar la convivencia digital. También hicieron un llamado a las autoridades locales para crear espacios seguros de ocio y tiempo libre que ofrezcan actividades lúdicas que fomenten la creatividad y la socialización fuera del entorno digital, ayudando así a los jóvenes a desconectarse de la gratificación instantánea que ofrecen las pantallas.
Estas iniciativas buscan responder a las necesidades de la juventud actual, planteando un enfoque integral que contemple tanto la educación digital como la creación de un entorno seguro y saludable para el desarrollo de los más jóvenes en el ámbito digital.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
