En un año inolvidable para el balonmano local, el equipo ha cerrado la temporada con un broche de oro tras una victoria histórica que quedará grabada en la memoria de sus aficionados. Santi Urdiales, el técnico cántabro, no pudo ocultar su satisfacción al ver cómo su equipo se alzó con la victoria ante el BM Granollers, un triunfo que simboliza el esfuerzo y la dedicación de una plantilla comprometida.
El jugador ciudadrealeño Antonio Rama se erigió como protagonista indiscutible del encuentro, aportando decisivamente al resultado final. Rama, tras el partido, destacó la labor de sus compañeros, enfatizando que el trabajo en equipo es fundamental para alcanzar metas significativas en el balonmano. «Sin la motivación y el esfuerzo de cada uno de mis compañeros, no hubiésemos logrado este triunfo», manifestó con humildad el jugador, quien ha sido clave durante toda la temporada en la Liga Asobal.
Urdiales, por su parte, consideró que esta victoria no solo representa un cumplido para su equipo, sino que también simboliza el cierre perfecto a un año repleto de desafíos y superaciones. Durante la rueda de prensa posterior al partido, el entrenador puso de relieve la constancia y el sacrificio necesarios para triunfar en el deporte, expresando su orgullo por el rendimiento de los jugadores y el logro conjunto que también celebra la comunidad local.
Este triunfo no solo es un hito en la trayectoria del equipo, sino que también refleja el crecimiento y la evolución dentro del balonmano en la región. La afición ha sido un componente esencial, aportando un aliento constante que ha motivado a los jugadores a lo largo de la temporada.
Tras esta victoria, el balonmano local se sitúa en un lugar destacado en el panorama deportivo, dejando la puerta abierta a un futuro prometedor. La combinación de talento, ética de trabajo y el respaldo de una afición entregada auguran nuevas y emocionantes historias por contar para este equipo que ha demostrado que, con esfuerzo y dedicación, los sueños se pueden alcanzar.
