El Calvo Sotelo se enfrentó a un duro desafío en su reciente partido contra el Azuqueca, bajo la dirección de Javi Sánchez. A pesar de contar con un jugador más en el terreno de juego desde el minuto 54 debido a la expulsión de Marco, el equipo no logró mostrar el rendimiento esperado. La escasez de oportunidades de gol fue alarmante y su falta de ideas en ataque se volvió evidente, dejando a los aficionados con un sabor amargo.
Durante el transcurso del encuentro, la frustración aumentó tanto en el campo como en las gradas. A pesar de intentar diversas estrategias para superar el sólido muro defensivo del Azuqueca, el Calvo Sotelo se encontró con una ofensiva ineficaz, limitando sus opciones para anotar. El partido culminó en un empate, un resultado que no satisface las expectativas de un equipo que aspira a mejorar su posición en la clasificación.
Con este empate, el Calvo Sotelo se ubica en una situación inquietante en la tabla, sumando apenas 20 puntos. Este resultado pone de relieve la urgencia de un cambio en su enfoque táctico. La dificultad para capitalizar la ventaja numérica sugiere que es imprescindible un reevaluación estratégica. Para evitar que situaciones como esta se repitan en el futuro, el equipo deberá enfocarse en mejorar su cohesión y en desarrollar jugadas más efectivas, buscando así un aumento en su rendimiento en los próximos encuentros.
