Risto Mejide se encuentra en el centro de una nueva controversia humorística tras las declaraciones de Raúl Cimas en el programa «La Revuelta». Durante su intervención, Cimas relató de manera extravagante y surrealista cómo Mejide y su equipo en «Todo es mentira» lo habían presionado para involucrarse en una supuesta disputa entre el humorista David Broncano y el show «El Hormiguero». Aunque el relato de Cimas era una narración ficticia destinada a hacer reír, la reacción inmediata de Mejide fue asegurar que daría una respuesta a la altura en su programa.
Cimas construyó su anécdota con una serie de elementos absurdos, que incluyeron golpes con toallas mojadas y extrañas interacciones con figuras mediáticas. A pesar de que buscaba generar risas, su relato provocó una serie de comentarios en redes sociales y un creciente interés en la interacción entre ambos humoristas. Cimas, al finalizar su intervención, dejó claro que lo hacía por aprecio hacia Broncano y el programa «El Hormiguero», enfatizando que no había intención de crear una verdadera controversia.
Por su parte, Risto Mejide prometió a su audiencia que se pronunciaría al respecto durante la emisión de «Todo es mentira». En un tuit, confirmó que iba a dedicar tiempo al tema, afirmando que las acusaciones eran lo suficientemente serias como para merecer una respuesta adecuada. La expectativa entre los seguidores de ambos programas creció mientras se anticipaba el momento en que Mejide, conocido por su estilo directo, abordaría el asunto.
Este intercambio entre Mejide y Cimas ilustra cómo el humor y la televisión permiten la creación de escenas imprevisibles que mantienen al público cautivado. Ambos humoristas, cada uno con su particular enfoque, han sabido aprovechar la situación para reafirmar su relevancia en el panorama mediático actual, manteniendo a sus seguidores en constante expectativa. La revelación de Mejide en su programa se espera con gran interés por parte de sus fans y de los seguidores de la comedia en general.
