Esta mañana, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha destacado el enfoque de desarrollo y honestidad de su gobierno durante el segundo Debate sobre el estado de la Región, celebrado en las Cortes regionales. En su intervención, ha subrayado los logros económicos y sociales alcanzados durante su mandato y ha trazado las líneas de futuro para su administración.
García-Page ha adoptado un tono conciliador, pidiendo disculpas a quienes se hayan sentido ofendidos por sus declaraciones, e instando a los parlamentarios a evitar la confrontación que a menudo caracteriza a otras instituciones, en referencia a la situación política del Congreso de los Diputados. El presidente ha expresado su preocupación por la polarización política en el país, que atribuye a una estrategia premeditada por ciertos actores.
El mandatario ha enfatizado la necesidad de fomentar consensos y acuerdos, mostrando su deseo de mantener a Castilla-La Mancha alejada del populismo y del frentismo. García-Page ha reafirmado su compromiso de cumplir con las promesas realizadas a la ciudadanía, destacando la estabilidad y certidumbre que su gobierno, según él, ha proporcionado.
En el ámbito económico, ha informado que Castilla-La Mancha ocupa el cuarto lugar en creación de riqueza entre las comunidades autónomas, superando a regiones que han tenido históricamente mejor posición. Asimismo, el Producto Interior Bruto (PIB) de la región ha alcanzado su nivel más alto en la historia, con un crecimiento proyectado del 3,7 % para 2024, superior a la media nacional.
Durante su gestión, García-Page ha resaltado que se han creado aproximadamente 53 empleos diarios, en contraposición con los años de administración del Partido Popular, caracterizados por la destrucción de empleo. También ha mencionado mejoras en el sistema de salud, con la incorporación de cerca de 13.000 profesionales sanitarios, y en el ámbito educativo, donde ha disminuido notablemente la tasa de abandono escolar y aumentado la inversión por alumno.
Finalmente, el presidente ha expresado su deseo de gobernar con humildad, escuchando las inquietudes de los ciudadanos y evitando la soberbia institucional. García-Page ha manifestado su aspiración de que Castilla-La Mancha sea un modelo para el resto de España, promoviendo la moderación y el respeto a las normas en el ámbito político y social.
vía: Diario de Castilla-La Mancha