Este sábado, varias ciudades de Castilla-La Mancha, incluyendo Cuenca, Guadalajara y Albacete, fueron escenario de masivas manifestaciones en apoyo al derecho a la vivienda. Estas movilizaciones forman parte de una convocatoria nacional que busca visibilizar la problemática del aumento de los precios de los alquileres y la accesibilidad a una vivienda digna.
En Albacete, la marcha comenzó a las 17:00 horas en la plaza de José Ramón Martínez y, durante una hora, recorrió las calles del barrio de los Franciscanos, una de las zonas más pobladas y afectadas por las subidas de precios. Carlos Antonio González, portavoz de la plataforma Albacete por la Vivienda, enfatizó que la manifestación representa el clamor de la ciudadanía por una reducción en el costo de los alquileres.
González señaló que, mientras antes un alquiler de 600 euros era considerado alto, ahora los precios han llegado a los 800 euros. Alertó que, si la situación continúa sin cambios, el futuro se asemejará al que vive la clase trabajadora en ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia. La plataforma, fundada en noviembre, busca cohesionar a nivel nacional la demanda de medidas que frenen el aumento de los precios de la vivienda.
Con un cartel que proclamaba ‘La vivienda es un derecho, no es un privilegio’, los manifestantes gritaron lemas como ‘tu casero te roba el sueldo’ y ‘los Franciscanos no se venden’. Entre ellos se encontraba Pilar Cano, una jubilada de 64 años, quien lamentó que la juventud tiene “muy difícil” acceder a una vivienda. Aunque ella posee su hogar, mencionó que varios de sus sobrinos, profesionales y mayores de 30 años, no pueden permitirse un piso en la actualidad.
Asimismo, José Pedro Sánchez, un estudiante de psicología de 30 años, calificó de «vergonzosa» la situación actual de la vivienda en España y consideró que las medidas adoptadas hasta ahora por el Gobierno y los ayuntamientos son «superficiales». Se mostró escéptico respecto a su capacidad para encontrar una vivienda asequible en el futuro.
La manifestación concluyó con la lectura de un manifiesto que exigía acciones concretas frente a lo que se describe como una estrategia estructural que beneficia a unos pocos a expensas de la mayoría. El texto denunciaba la creciente necesidad de destinar gran parte de los ingresos a pagar la vivienda y critiquaba la especulación inmobiliaria, el rentismo y la falta de políticas efectivas para garantizar el acceso a una vivienda digna.
Ante esta situación, la organización instó a «organizarse y crear herramientas de negociación colectiva» para presionar a quienes lucran con la vivienda. También se demandó una reducción inmediata de los precios de los alquileres, la recuperación de viviendas vacías en manos de especuladores, la desarticulación de empresas de desalojo y el cese de la represión contra el movimiento por la vivienda.
En Guadalajara, alrededor del mediodía, el Sindicato de Inquilinas e Inquilinos organizó una concentración en la plaza de Santo Domingo, mientras que en Cuenca se llevó a cabo una manifestación también centrada en el derecho a una vivienda digna en la estación de tren. La creciente movilización en defensa del derecho a la vivienda refleja una preocupación social alarmante que exige atención y acción inmediata por parte de las autoridades competentes.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
