La Asociación de Vecinos del barrio de Casablanca ha manifestado su creciente frustración ante los problemas asociados al edificio deshabitado del Paseo San Antonio, el cual fue escenario de un nuevo incidente este jueves. Alrededor de las 17.45 horas, la Policía Nacional tuvo que intervenir en el inmueble tras recibir informes sobre una posible okupación, logrando sacar a tres personas del interior al llegar las patrullas.
Este episodio marca el tercer incidente en pocos meses que ha requerido la intervención de las autoridades, tanto de la policía como de los bomberos. La última actuación de este tipo había tenido lugar en agosto, cuando se registró un incendio en el tejado de la edificación. Los vecinos, alarmados por la situación, han denunciado que el abandono sostenido de este inmueble durante más de 15 años lo ha convertido en un foco de inseguridad, lo que ha generado un notable malestar en la comunidad.
Desde la asociación, se ha hecho un llamado a la propiedad del edificio para que asuma su responsabilidad y tome medidas que pongan fin a esta problemática. Además, instan al Ayuntamiento de Cuenca a actuar sin demora, resaltando que los residentes no pueden seguir tolerando un clima de inseguridad constante.
Asimismo, piden un refuerzo de la vigilancia policial, especialmente durante las noches, en las áreas circundantes al edificio, que incluyen el supermercado Ahorramás, la calle Tarancón, la calle Virgen de las Angustias y la calle Virgen del Sagrario, lugares donde se han reportado conductas incívicas que preocupan a la comunidad.
La Asociación de Vecinos subraya que el barrio no puede seguir soportando esta situación y exige soluciones inmediatas tanto de la propiedad como de las administraciones competentes. En caso de que no se avance en un plazo razonable, advierten que la asociación, junto con los vecinos, no dudará en iniciar movilizaciones, recoger firmas y realizar todas las acciones necesarias para garantizar la seguridad de todos y encontrar una solución definitiva al edificio en cuestión.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
