En un emocionante enfrentamiento en el Pabellón Municipal “Agustín Mourís”, el Viña Albali Valdepeñas logró una estrecha victoria por 0-1 frente al Noia Portus Apostoli durante la décima jornada de Liga en Primera División. El único gol del partido, un tanto que resultó ser decisivo, llegó de la mano de Carrasco en el primer minuto, marcando así un comienzo fulgurante que estableció la pauta del encuentro.
Este choque fue significativo, ya que significó el debut de Ricardo Íñiguez al mando del Viña Albali Valdepeñas. A pesar de ser un estreno, Íñiguez pudo disfrutar de un triunfo que se cimentó en una sólida actuación defensiva y el impacto inmediato de un gol tempranero.
Durante el transcurso del partido, el Noia Portus Apostoli luchó por igualar el marcador, pero sus esfuerzos se encontraron con dos factores determinantes: el travesaño y las brillantes intervenciones del guardameta Álex González. Después de su regreso a la titularidad, González destacó con varias paradas clave que mantuvieron a su equipo con ventaja. Tanto el equipo local como los visitantes generaron oportunidades significativas, aunque las más claras antes del descanso fueron para los de Valdepeñas.
Mientras el encuentro avanzaba, el Viña Albali Valdepeñas supo administrar su ventaja mínima, resistiendo los embates del Noia, que intentó modificar el resultado incluso recurriendo a la estrategia de utilizar a Garrincha como portero-jugador. Esta victoria no solo representó un respiro para el equipo, alejándolos de la zona de descenso antes del parón liguero, sino que también destacó la importancia de una defensa sólida y el papel crucial de Álex González bajo los palos, quien fue fundamental para preservar la ventaja hasta el pitido final.