En una reciente entrevista, el arquitecto español Javier García compartió valiosos consejos sobre qué tipos de casas deben evitar los compradores. Según García, hay tres tipos de viviendas que, además de presentar problemas estructurales y estéticos, pueden llevar a altos costos a largo plazo para sus propietarios.
El primer tipo de casa que García desaconseja son aquellas con mala iluminación natural. Asegura que las viviendas con poca luz no solo pueden resultar deprimente, sino que también incrementan el consumo de electricidad debido al uso excesivo de iluminación artificial. Esta falta de luz no solo afecta el ambiente del hogar, sino que también puede tener repercusiones negativas en la salud y el bienestar de los habitantes, repercutiendo en su ánimo y productividad.
El segundo tipo que se debe evitar son las viviendas con mala ventilación. El arquitecto resalta la importancia de una buena circulación de aire para mantener un espacio saludable. Las casas con ventilación insuficiente tienden a acumular humedad, lo cual puede derivar en problemas de moho y hongos. A la larga, esta situación puede no solo dañar la estructura del inmueble, sino también provocar problemas de salud, tales como alergias o dificultades respiratorias.
Finalmente, García menciona las viviendas con una distribución ineficaz del espacio como un tercer tipo a evitar. Asegura que una mala distribución en la disposición de las habitaciones puede hacer que una casa que parece amplia se sienta pequeña y poco funcional. Resalta la necesidad de que los espacios sean prácticos y cómodos para que realmente se adapten a las necesidades de los residentes. Distribuciones inadecuadas pueden complicar la colocación de muebles y la circulación por las estancias, lo que incide en la funcionalidad y el confort del hogar.
El arquitecto aconseja a los posibles compradores que realicen una inspección detallada de cualquier propiedad antes de concretar una inversión. Resalta que es fundamental considerar estos elementos, ya que no solo afectan la calidad de vida, sino que también condicionan la inversión económica a largo plazo. Las recomendaciones de García se presentan como una guía esencial para quienes buscan evitar problemas futuros en la adquisición de una vivienda.
