La Viceconsejería de Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha ha anunciado el inicio de un expediente para declarar el Juego de las Caras en Calzada de Calatrava como Bien de Interés Cultural (BIC), categorizándolo como Bien Inmaterial. Esta decisión responde al compromiso de la comunidad local por preservar esta valiosa manifestación cultural, tal como se detalla en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM) y es informado por Europa Press.
El Juego de las Caras es considerado una parte fundamental de la memoria colectiva del pueblo de Castilla-La Mancha, ayudando a fortalecer los lazos identitarios y facilitando la transmisión de significados y símbolos que enriquecen el patrimonio cultural de la región. En Calzada de Calatrava, esta tradición ha sido cuidadosamentemantenida por la sociedad civil, que ha hecho un esfuerzo notable por conservar sus características y su esencia popular, mientras que las administraciones han jugado un papel secundario en su preservación.
Celebrado cada Viernes Santo, el Juego de las Caras rememora el momento en el que los soldados romanos apostaron las vestiduras de Jesús al pie de la cruz. Este evento no solo es una manifestación popular que reúne gran participación, sino que también cuenta con una rica ceremonial que ha evolucionado a lo largo de los años.
Lo que distingue al Juego de las Caras es que es la única festividad profana que se celebra en Castilla-La Mancha durante la Cuaresma. Reconocida como Fiesta de Interés Turístico Regional en 1993 y, posteriormente, como Fiesta de Interés Turístico Nacional, el evento atrae a miles de visitantes de diferentes partes del país, convirtiéndose en un referente de la Semana Santa en la región.
El juego se lleva a cabo después de la Procesión del Encuentro, comenzando a las 11:00 horas y finalizando a las 17:00 horas, justo antes del Santo Entierro. Durante el evento, los subastadores delimitan un área en el suelo donde los jugadores apuestan dinero, participando en una dinámica que consiste en lanzar dos monedas, conocidas como «piezas». El resultado del lanzamiento determina el ganador entre los apostadores y la banca.
Desde tiempos remotos, el Juego de las Caras se ha celebrado en espacios públicos y emblemáticos de Calzada de Calatrava, como el histórico edificio ‘El Casino’. Con la propuesta de declarar este juego como Bien de Interés Cultural, se busca reconocer su valor patrimonial y fomentar una mayor concienciación acerca de su importancia cultural. La apertura del expediente permitirá la implementación de un régimen de protección provisional, según las normativas aplicables a bienes de interés cultural, asegurando así la conservación de esta rica tradición para las generaciones venideras.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
