Las obras del antiguo convento de la Inmaculada Concepción, conocido popularmente como el convento de las Terreras en Ciudad Real, están avanzando hacia su transformación en un centro cultural. Esta iniciativa busca priorizar el turismo, la gastronomía, el arte y la cultura, y fue visitada recientemente por el alcalde Francisco Cañizares, acompañado por los concejales de Obras, Miguel Hervás, y de Promoción Económica, Yolanda Torres. Las obras comenzaron a finales de octubre del año pasado.
Miguel Hervás ha destacado que la primera fase de la intervención cuenta con un presupuesto de 1,8 millones de euros, que incluye la adecuación de los exteriores, la apertura de un nuevo acceso, la habilitación de una zona de cáterin y la instalación de aseos accesibles. «No vamos a esperar a que toda la obra esté finalizada para dotarla de uso. En cuanto tengamos un espacio seguro y reformado, comenzaremos a utilizarlo», declaró el concejal.
La próxima etapa del proyecto implicará la consolidación de las cubiertas, un proceso considerado el más complejo de esta fase inicial. Una vez asegurada la estructura, el convento podrá albergar actos culturales, presentaciones, actividades turísticas y eventos municipales, lo que aliviará la demanda de espacios como el Antiguo Casino y el propio Ayuntamiento.
En cuanto al uso futuro del inmueble, se proyecta la habilitación de áreas como el patio, el coro y la capilla para exposiciones y actividades culturales. Sin embargo, la intervención ha encontrado ciertos imprevistos, como la retirada de un antiguo depósito de gasoil en el jardín, que reveló la existencia de una cueva oculta. Este hallazgo ha llevado a detener temporalmente las obras en esa zona, a la espera de la evaluación por parte de técnicos de Patrimonio de la Junta y arqueólogos que determinen su valor histórico.
Yolanda Torres ha indicado que la duración prevista de los trabajos es de aproximadamente un año, aunque los nuevos descubrimientos podrían extender estos plazos. A pesar de ello, ha enfatizado que la prioridad es asegurar la seguridad del edificio y resaltar su riqueza patrimonial. Con esta intervención, el Ayuntamiento no solo busca preservar un edificio histórico significativo en Ciudad Real, sino también abrirlo a la ciudadanía y establecerlo como un referente cultural y social en el corazón de la ciudad.
vía: Diario de Castilla-La Mancha