El entrenador de Herencia, Jesús David Romero, ha expresado su descontento tras la expulsión de su jugador Moi durante el primer tiempo del partido. Según Romero, la decisión del árbitro fue injusta y afectó el rendimiento del equipo, que hasta ese momento dominaba el juego. «Para mí no es expulsión, pero claramente. Hasta ese momento teníamos el partido controlado y se estaba desarrollando como lo habíamos planteado», destacó en una declaración posterior al encuentro.
A pesar de quedarse con un jugador menos, el equipo de Herencia mantuvo una sólida defensa, gracias en gran parte a la destacada actuación de su portero, Rubén. Romero confirmó que la motivación de Rubén por enfrentarse a su antiguo equipo jugó un papel crucial en su rendimiento: «Sabíamos que podía estar motivado al enfrentarse a su exequipo y por eso apostamos por él. Ha hecho un gran partido.»
Mirando hacia el futuro, Romero se muestra consciente de los desafíos que se avecinan. Herencia tiene un calendario complicado por delante, con partidos importantes contra La Roda y San Clemente. «Nos viene un Tourmalet con La Roda y San Clemente, pero lo prepararemos como un partido más», afirmó, transmitiendo confianza en la capacidad de su equipo para superar las adversidades que se presenten.
El espíritu de lucha y la determinación del equipo de Herencia, incluso ante dificultades, son elementos que Romero valora como esenciales para seguir compitiendo en la temporada.
Fuente: Web del Sporting de Alcázar
