El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, expresó su preocupación en relación con la reciente reunión celebrada en Barcelona para discutir la financiación singular de Cataluña. Durante un evento en Pozo Lorente (Albacete), el mandatario lamentó que en una España «rica y plural», el concepto de pluralidad se utilice a menudo para justificar desigualdades. «No vamos a caer en ninguna trampa. Antes de poder negociar con alguien por separado, tendríamos que habernos sentado todos juntos», afirmó.
García-Page también criticó la falta de diálogo entre el Estado y las comunidades autónomas sobre temas de financiación, señalando que había esperado diez años para que se llevase a cabo una reunión seria sobre este asunto. En su opinión, es inconcebible que este primer encuentro se utilice mayormente para «pagar favores o chantajes».
Durante la inauguración de la Escuela Infantil ‘Las Amapolas’, el presidente recordó que el 90% del presupuesto de una comunidad autónoma se destina a educación, sanidad y servicios sociales. Cuestionó quién debe tener más derechos a estos servicios, enfatizando que la financiación autonómica es crucial para sostener el Estado del bienestar y garantizar la igualdad de oportunidades en todo el territorio.
García-Page alertó sobre el actual debate de financiación en España, argumentando que está siendo planteado por quienes buscan romper el país. «Si no lo plantean los independentistas, estaríamos discutiendo entre todos cómo avanzar juntos», comentó. Insistió en que si la Comunidad de Madrid hiciera la misma demanda que ahora se formula desde Cataluña, las críticas serían inmediatas por parte de los firmantes del acuerdo.
El presidente subrayó su compromiso con Castilla-La Mancha, remarcando que la tierra a la que se debe es España. Advirtió contra un modelo en el cual las autonomías repartan recursos mientras el Estado mendiga financiamiento para gastos comunes, afirmando que eso sería inaceptable.
Por último, García-Page subrayó que los impuestos son pagados por personas y empresas, no por territorios. Se mostró firme en que la progresividad fiscal debe aplicarse también a las regiones, para asegurar que “el que más tiene, más paga”, cuestionando así cualquier intento de manipular esta lógica.
vía: Diario de Castilla-La Mancha