La Feria Nacional del Vino (FENAVIN), que se llevará a cabo en Ciudad Real del 6 al 8 de mayo, ofrecerá una interesante ponencia enfocada en las antiguas bodegas de La Mancha, enmarcada dentro del espacio «La Cultura y el Vino». Esta sesión tiene como propósito resaltar el patrimonio enológico e histórico de la región, subrayando su potencial como motor de desarrollo cultural, artístico y turístico.
El evento, titulado «Antiguas Bodegas de La Mancha. Posibilidades culturales y turísticas», será moderado por Dionisio Cañas, profesor emérito de la Universidad de la Ciudad de Nueva York. La ponencia contará con la participación de Manuela Sevilla, directora de la Biblioteca Pública de Quintanar de la Orden y presidenta del Instituto de Arte Contemporáneo (IAC) en Castilla-La Mancha hasta 2024, así como del doctor en Filosofía Santiago Arroyo.
Programada para el miércoles 7 de mayo a las 10 horas, la sesión abordará la recuperación y valorización del legado vitivinícola manchego, no solo en términos económicos, sino también como un elemento esencial de la identidad cultural del territorio. Cañas centrará su intervención en la bodega centenaria Virgen de las Nieves, situada en Cinco Casas, enfatizando su valor patrimonial, que incluye una de las cuevas hechas a mano más grandes de la región, así como maquinaria original y una vivienda que podría ser adaptada para investigadores o artistas. “Es un lugar único, que podría convertirse en un centro de interpretación del vino ideal para actividades culturales”, afirma.
Por su parte, Manuela Sevilla destacará la sensibilidad artística que estos espacios generan y su potencial como centros culturales. Explicará la importancia de revitalizar el espacio cultural manchego, en paralelo a la labor del enólogo y del artista. “Los artistas encuentran en estos lugares una fuente de inspiración por su historia, herramientas y texturas”, comenta. La rehabilitación de estos entornos para el arte contemporáneo, la música o el cine puede atraer turismo de calidad y generar nuevas obras inspiradas en la rica tradición vinícola de la región.
La ponencia, pues, se erige como una invitación a reflexionar sobre el vino no solo como un recurso económico, sino como un eje central de la cultura, la identidad y la creación artística en La Mancha.