Renata Collado, modelo mexicana, y Alonso Aznar, hijo del expresidente español José María Aznar, están a punto de celebrar su esperado enlace matrimonial el próximo 7 de diciembre en Mérida, Yucatán. Este evento, que promete ser uno de los más destacados del año en el ámbito social, reunirá a importantes figuras tanto de México como de Europa, dando lugar a un encuentro de élites.
La pareja, que ha compartido su vida durante los últimos tres años en ciudades como Miami, Londres y Nueva York, ha cultivado una relación a base de experiencias en diversas culturas. Renata Collado, hija del empresario Pablo Collado y la fotógrafa Mónica de Cima, ha forjado una trayectoria notable que abarca el modelaje, la sostenibilidad y el arte. Por su parte, Alonso Aznar, de 36 años, se ha aventurado en el sector empresarial como director de The Consello Group, destacándose en el asesoramiento financiero y la estrategia empresarial.
La boda reunirá a una selecta lista de invitados, incluidos Álvaro Falcó, marqués de Cubas, y Carlos Torretta, esposo de Marta Ortega, presidenta de Inditex. Asimismo, se espera la presencia de Michelle Salas, hija de Luis Miguel y amiga cercana de Renata, lo que subraya la dimensión internacional del evento. La celebración no solo será un homenaje a la cultura mexicana, sino que también simbolizará la modernidad europea, marcando el inicio de la nueva vida de la pareja en Miami.
Renata Collado no solo es conocida por su carrera en la moda, sino también por su implicación en proyectos de sostenibilidad como Planet Buyback y Kind Designs, iniciativas dedicadas a la protección del medio ambiente. Su formación en humanidades por The New School en Nueva York le ha permitido combinar su herencia familiar y empresarial con un firme compromiso hacia la conservación ecológica.
Este matrimonio es más que un mero enlace personal; representa la unión entre dos culturas ricas y diversas, cimentando los lazos entre México y España. Desde que Alonso presentó oficialmente a Renata en 2021, su relación ha prosperado y fortalecido en eventos sociales destacados de ambos países. La boda en Mérida será, sin duda, un hito que resaltará la colaboración e integración cultural entre ambas naciones, y un testimonio del amor que une a la pareja.
