El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, ha sido liberado de la prisión de Belmarsh en el Reino Unido después de llegar a un acuerdo con las autoridades de Estados Unidos. Tras más de cinco años en prisión, Assange pudo abandonar el país y se dirigirá a su país natal, Australia, una vez que se haya formalizado completamente el acuerdo.
El comunicado oficial de WikiLeaks resaltó que la liberación de Assange fue posible gracias a una campaña global que involucró a organizadores de base, defensores de la libertad de prensa, legisladores y líderes políticos de diferentes espectros, así como a la intervención de la ONU. Este esfuerzo conjunto permitió negociaciones con el Departamento de Justicia de EE.UU. que culminaron en un acuerdo que aún está en proceso de concretarse.
Assange enfrentará un cargo bajo la Ley de Espionaje por conspirar para obtener y difundir información clasificada de defensa nacional, derivado de la publicación de documentos relacionados con las guerras de Afganistán e Irak. Se espera que comparezca en un tribunal federal para declararse culpable una vez que regrese a los Estados Unidos.
El gobierno australiano ha manifestado su apoyo a Assange y continúa brindando asistencia consular. Por su parte, la madre del fundador de WikiLeaks, Christine Assange, expresó su gratitud y alivio al ver que la pesadilla de su hijo está llegando a su fin, destacando la importancia de la diplomacia discreta en este caso.