A menos de dos semanas para las elecciones presidenciales del 5 de noviembre en Estados Unidos, la competencia entre Kamala Harris y Donald Trump se ha vuelto sumamente reñida. Según las encuestas, Harris mantiene una leve ventaja en el voto popular, pero Trump ha intensificado su campaña en estados clave, lo que podría resultar en una victoria a nivel del Colegio Electoral.
El sistema electoral estadounidense se basa en el Colegio Electoral, donde un candidato necesita al menos 270 votos para alcanzar la victoria. Los votos se distribuyen por estados, y en muchos casos, el ganador se lleva la totalidad de los votos electorales de ese estado. Actualmente, Trump ha recortado distancias en Arizona, Georgia y Pensilvania, elementos cruciales para su posible triunfo. En contraste, Harris se mantiene como líder en Míchigan y Wisconsin, considerados bastiones del Partido Demócrata en el cinturón del óxido.
En particular, Arizona y Georgia han visto un cambio significativo, ya que Trump ha logrado superar la ventaja de Harris en estas regiones, un giro notable frente a los resultados de meses anteriores. En Pensilvania, estado que podría definir el resultado de las elecciones, Trump ha tomado la delantera, aunque de manera muy ajustada.
Harris, por su parte, continúa teniendo un buen desempeño en Míchigan y Wisconsin, estados que jugaron un papel fundamental en la victoria de Trump en 2016 y que ahora parecen inclinarse hacía los demócratas. No obstante, el panorama electoral sigue siendo incierto, ya que las diferencias son mínimas en los estados decisivos y podrían cambiar rápidamente a medida que avanza la campaña.
La clave de esta elección radicará en el comportamiento de los votantes en los estados cruciales. Arizona, Georgia, Pensilvania y Carolina del Norte se perfilan como elementos decisivos para determinar al próximo presidente. Aunque Trump ha ganado terreno en tres de estos estados, la posibilidad de que Harris alcance la presidencia depende en gran medida de no perderlos, ya que eso complicaría su camino a la Casa Blanca.
Las encuestas de FiveThirtyEight subrayan que la carrera electoral permanece abierta, con resultados inciertos en al menos cinco de los siete estados clave. Se prevé que la elección se decida por márgenes muy estrechos, lo que podría hacer que el Colegio Electoral juegue nuevamente un papel fundamental en un proceso electoral que podría llevar a Trump de regreso a la presidencia.
