La conmoción de Mocejón tras la trágica despedida de Mateo
El pequeño municipio toledano de Mocejón ha quedado sumido en la tristeza este miércoles, al despedir a Mateo, un niño de 11 años que fue presuntamente asesinado el pasado domingo en el campo de fútbol ‘Ángel Tardío’ de la localidad. La comunidad, compuesta por más de 5.000 habitantes, ha enmudecido ante la tragedia y los dolorosos acontecimientos que han marcado las últimas 72 horas.
La ceremonia de despedida tuvo lugar en la parroquia de San Esteban, que se vio desbordada por la afluencia de personas que acudieron para dar su último adiós al pequeño. Las campanas de la iglesia sonaron a difunto poco antes de las 12:00 horas, mientras un constante flujo de dolientes se congregaba en el interior y exterior del templo.
A mediodía, la llegada de dos coches fúnebres a la iglesia marcó un momento particularmente conmovedor. Uno de ellos transportaba el féretro de Mateo, que fue recibido por el párroco encargado de oficiar la ceremonia. El otro vehículo estaba lleno de coronas de flores, entre ellas una de los amigos del niño, adornada con una emotiva frase: «Siempre en nuestro corazón».
En paralelo a la tristeza de la comunidad, la Guardia Civil confirmó el hallazgo del presunto arma homicida en la calle Dalí de Mocejón, identificando restos biológicos humanos en el mismo. Este descubrimiento se produjo dos días después de la detención del supuesto autor de la agresión, lo que ha desencadenado una amplia operación de búsqueda con la participación del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) y el Grupo de Acción Operativa (GAO).
La investigación sigue bajo secreto de sumario, y se anticipa que el presunto autor del crimen sea presentado ante el juez este jueves. En este contexto de dolor, la familia de Mateo ha emitido un comunicado solicitando a los medios de comunicación que respeten su intimidad en estos momentos difíciles y que no les acompañen al cementerio. Han expresado su agradecimiento por el apoyo recibido de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como de las instituciones locales y de los vecinos de Mocejón y Escalonilla.
Asimismo, la familia ha denunciado el ataque sufrido por Asell Sánchez, portavoz de la familia, quien ha sido objeto de agresiones verbales en medio de esta tragedia. En su comunicado, destacaron que no buscan venganza, sino justicia, y esperan que la ley aplique todo su peso sobre el autor de este cruel asesinato.
Por otro lado, la Fiscalía contra los Delitos de Odio y Discriminación ha comenzado a investigar los mensajes de odio y falsedad que han circulado en redes sociales tras el asesinato de Mateo. Estos mensajes, que criminalizan de manera general a personas extranjeras, están dirigidos especialmente contra menores sin referentes familiares en España, buscando provocar sentimientos de hostilidad.
El fiscal Miguel Ángel Aguilar se ha manifestado a favor de restringir el acceso a redes sociales para quienes cometan delitos de odio, y ha subrayado la necesidad de que los usuarios estén debidamente identificados.
La comunidad de Mocejón sigue inmersa en el duelo por la pérdida de Mateo, mientras la esperanza de justicia y la lucha contra el odio se convierten en faros en medio de la penumbra que ha dejado esta tragedia.
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