En la vida cotidiana, la lavadora se ha convertido en un electrodoméstico fundamental que facilita la tarea de mantener la ropa limpia, ahorrando tiempo y esfuerzo. No obstante, es esencial tener en cuenta que algunas prendas y objetos no son aptos para su lavado, ya que pueden provocar daños tanto en el aparato como en los artículos mismos. A continuación, se presentan nueve cosas que es recomendable mantener alejadas de la lavadora.
En primer lugar, están las prendas delicadas y los sujetadores con aro. El uso de materiales como encaje y seda en estas piezas puede resultar problemático, ya que se pueden enganchar en otros objetos o sufrir daños debido al movimiento del tambor. En el caso de los sujetadores con aro, el metal puede desprenderse, lo que podría causar averías en la lavadora.
Los zapatos deportivos y las zapatillas son otros elementos que requieren un tratamiento especial. A pesar de parecer resistentes, el lavado en este electrodoméstico puede deformarlos o desprender partes que pueden obstruir el sistema interno de la máquina.
Asimismo, se deben evitar las prendas que contienen piezas metálicas grandes, como chaquetas con cremalleras pesadas o prendas con tachuelas. Estos componentes son capaces de arañar el interior de la lavadora y afectar su funcionamiento a largo plazo.
Los objetos pequeños y sueltos representan un gran inconveniente en el lavado. Monedas, llaves y otros artículos olvidados en los bolsillos pueden provocar bloqueos en el tambor al golpear las paredes internas de la lavadora. Por lo tanto, es crucial revisar los bolsillos antes de cargar la máquina.
Las alfombras pequeñas y tapetes, especialmente aquellos con bases de goma, deben permanecer fuera del ciclo de lavado. El movimiento de la lavadora puede deteriorar la goma y desprender residuos que pueden obstruir el aparato.
Por otro lado, ciertos textiles, como cortinas y mantas pesadas, no son recomendables para la lavadora. Su peso una vez mojados puede provocar un desbalance y sobrecargar la máquina, lo que podría resultar en daños mecánicos costosos.
Las prendas deportivas, diseñadas para repeler agua, también deben mantenerse alejadas de la lavadora. Estos materiales pueden atrapar gran cantidad de agua, dificultando el escurrido y creando un ambiente propicio para el moho.
Otro aspecto relevante a considerar es que los artículos manchados con productos químicos fuertes, como gasolina o solventes, jamás deben ser lavados en la máquina. Estos compuestos pueden generar reacciones peligrosas, provocando incendios o explosiones.
Finalmente, las almohadas de plumas son un claro enemigo de la lavadora. El proceso de lavado puede desplazar las plumas, amontonándolas y deformándolas, lo que deteriora su forma y funcionalidad. Además, las plumas desprendidas pueden obstruir el desagüe.
Evitar el lavado de estos nueve elementos no sólo ayudará a prolongar la vida útil de la lavadora, sino que también garantizará que la ropa y otros artículos del hogar se mantengan en óptimas condiciones.
