El lanzamiento de «Pinzón y Azulita», un cuento de Teresa Sánchez Laguna, se convirtió en un emotivo evento que reunió a amigos, familiares y amantes de la literatura infantil. La obra, dedicada especialmente a los más pequeños pero con un mensaje que resuena también en los adultos, recorre las experiencias de una pareja de tórtolas que enfrentan las influencias externas y los consejos engañosos.
Ilustrado por Adriana Guzmán, arquitecta y profesora de dibujo, cada página del cuento cobra vida gracias a su estilo único que captura la esencia de los protagonistas. Durante la presentación, celebrada en un ambiente marcado por la alegría, la teniente de alcalde de Cultura, Vanessa Irla Uriarte, elogió a la autora por su habilidad para transmitir mensajes profundos a través de sus escritos. “Teresa escribe con un objetivo claro, para que su mensaje cale en los corazones de los lectores”, afirmó Irla Uriarte, quien también aprovechó la ocasión para felicitar a la autora en su cumpleaños.
Cristina Galán, escritora presente en el evento, destacó la importancia de los cuentos infantiles en la educación emocional de los niños. Resaltó que «Pinzón y Azulita» no solo entretiene, sino que invita a la reflexión sobre la amistad, el amor y el crecimiento personal, muy relevantes tanto para quienes están en la infancia como para aquellos que han dejado atrás esa etapa.
Adriana Guzmán compartió su experiencia personal de llegada a Valdepeñas, recordando cómo encontró apoyo y afecto en la comunidad, y agradeció a Teresa por brindarle la oportunidad de ilustrar su cuento. A su vez, la autora explicó que «Pinzón y Azulita» nació de los relatos que compartía con sus nietos y se inspira en la esencia de la amistad y el amor familiar.
A lo largo de la narración, los protagonistas atraviesan situaciones que reflejan la necesidad de escuchar a quienes nos quieren y orientan, resaltando el valor de las raíces y la importancia de aprender de la experiencia. El evento culminó con la interpretación musical de un poema que cierra el cuento, a cargo de Alfredo Sánchez Rodríguez, así como una representación teatral que encantó al público, dejando una huella imborrable de magia y cariño. La obra de Sánchez Laguna promete ser un valioso recurso en la literatura infantil, invitando a los más pequeños a explorar el mundo con confianza y amor.