Cuenca es un espléndido destino en España, y para Semana Santa reviste especial atractivo, por cuando su celebración está declarada de Interés Turístico Internacional. Si te gusta viajar en Semana Santa y estás pensando en un lugar muy especial, sin duda que te encantará la preciosa ciudad de Cuenca. Que ofrece además de los ritos de la Semana Mayor otras atractivas opciones como gastronomía, arquitectura, y más…
Visitar la ciudad de Cuenca
Cualquier temporada del año es propicia para visitar esta ciudad española. Pero en Semana Santa también tendrás oportunidad de vivir una de las grandes tradiciones religiosas. En un lugar donde la misma se celebra por todo lo alto. Es tan impresionante la Semana Santa conquense que está declarada Fiesta de Interés Turístico Internacional. Son fechas muy concurridas en la ciudad que vive la alegría de la Semana Mayor y sus tradiciones.
Uno de los grandes atractivos de esta conmemoración religiosa son sus enormes y coloridas procesiones. Especialmente, destaca la procesión Camino del Calvario, popularmente conocida como Las Turbas. Las Turbas son esenciales de la procesión Camino del Calvario, la cual se celebra la madrugada del Viernes Santo y es la procesión más conocida de la región. La misma data nada menos que de abril de 1616 y en el año 2016 conmemoró su IV Centenario.
Según se conoce, Las Turbas se asocian a las antiguas fiestas paganas que se celebraban con la llegada de la primera luna de la primavera. Y que con el tiempo se adaptaron las celebraciones a ritos religiosos y dando lugar a procesiones, tamboradas o tamborradas. Ahora no será solo esta procesión la que te maravillará en Cuenca. Realmente visitar en Semana Santa esta ciudad española, es una gran experiencia, llena de atractivos, relax y ocasiones inolvidables.
Y mientras visitas Cuenca…
Disfruta de su enorme legado monumental. Porque Cuenca que remonta sus orígenes al Paleolítico es una ciudad antiquísima en la que a cada paso, descubres maravillosas construcciones. Sencillamente, su patrimonio histórico y arquitectónico, que se extiende por toda la ciudad antigua, es enorme. Lugares emblemáticos de la misma son sus famosas Casas Colgadas, parada obligada en la visita al entorno conquense.
Es tal la belleza de esta ciudad que fue declarada en 1996 Patrimonio Patrimonio Mundial de la Unesco. Concretamente la «Histórica ciudad amurallada de Cuenca» con los siguientes lugares: Recinto Intramuros, Barrio del Castillo, Barrio de San Antón y el Barrio Tiradores.
Su impresionante casco histórico, posee un patrimonio arquitectónico rico y bien conservado, que además, se constituye en un mirador natural sobre las hoces del río Júcar y del Huécar. Sin duda una vista que recordarás siempre en tu visita a esta región de España.
Debes realizar una visita a los museos de la ciudad, que en Semana Santa suelen atender en horario para los turistas. Y desde luego, los monumentos más importantes como la Catedral de Cuenca, precioso entorno gótico que data del 1208. Y las ya mencionadas Casas Colgadas, el monumento más característico de la ciudad. Las mismas, son un grupo de viviendas edificadas desde al menos el siglo XV en la hoz del Huécar.
El conjunto en la actualidad es de tres casas, dos de las cuales, llamadas Las Casas del Rey albergan el Museo de Arte Abstracto Español, mientras que en la otra, conocida como La Casa de la Sirena, hay un mesón. No puedes ver decir que visitaste la ciudad, si no has visto estas preciosas casas únicas y perfectas.
Disfruta la cocina conquense
Otro de los grandes atractivos de una visita a la ciudad, es su rica cocina tradicional. La que se distingue por elaborarse con productos de la región. Hay que probar el famoso morteruelo, con hígado y lomo de cerdo. En la ciudad como el resto de la región se degustan muchos platillos de caza menor. Así que encontrarás deliciosos platos elaborados con conejo o perdiz. Y también muy apreciada la carne de cerdo.
Como en todo lugar, la repostería como el alajú, rico postre elaborado con almendras y por qué no, el resolí. Esta es una bebida con aguardiente, café, canela, naranja y azúcar, pero en Cuenca abundan los platos y postres, así que disfruta tu estancia una cocina realmente ¡espectacular!
Piensa… en tu estancia
Unos días pocos pero realmente especiales, un recorrido a tu ritmo por el casco antiguo de la bella ciudad. Una tarde de merienda con queso manchego y el mejor vino del mundo… Quizá apetezca visitar los museos y descubrir de la historia de esta región tan especial. Por qué no sumarte al fervor religioso de los conquenses con sus celebraciones y procesiones…
No hace falta ir muy lejos, Cuenca está en camino a muchos lugares. Y es una de las ciudades españolas más atractivas en cualquier temporada del año…descubre por qué es patrimonio de la Humanidad…y confirma por ti mismo, que su Semana Santa es la mejor del mundo.
Imágenes: Pixabay, Wikipedia.