El concejal de Medioambiente, Río Tajo y Deportes del Ayuntamiento de Toledo, Rubén Lozano, ha realizado una inspección a la piscina municipal del barrio de Azucaica, confirmando que la temporada de verano en las piscinas de la ciudad ha comenzado sin incidentes. Sin embargo, ha señalado que, en comparación con el año anterior, la venta de entradas individuales ha experimentado un descenso debido a que el mes de julio no ha sido tan caluroso como en años anteriores.
A pesar de esta baja en la venta de entradas por día, el Ayuntamiento ha informado que la venta de abonos en las cinco piscinas municipales ha mostrado un aumento este año. Las piscinas mencionadas incluyen la del Campo Escolar, la Escuela Central de Educación Física, la del barrio de Santa Bárbara, la del Polígono y la de Azucaica.
Durante la última semana de julio, que fue marcada por una ola de calor, se registró un crecimiento de más del 3 por ciento en la afluencia a estas instalaciones en comparación con el mismo período del año anterior. Lozano también ha destacado la importancia de la seguridad en estas instalaciones, anunciando la dotación de nuevas prendas de trabajo para los socorristas que permitirán su identificación fácil desde cualquier punto de las piscinas. Además, se implementará el uso de silbatos para alertar sobre comportamientos riesgosos y para la evacuación de las piscinas al final del día.
Las piscinas municipales de Toledo están abiertas desde el 1 de junio hasta el 8 de septiembre, con horarios de apertura de las 12:00 a las 20:30 horas de lunes a viernes y hasta las 21:00 horas los sábados, domingos y festivos.
En cuanto al mantenimiento de las instalaciones deportivas, Lozano ha recordado que el Patronato Municipal Deportivo se encuentra activo en labores de conservación y preparación para la temporada invernal. Entre las mejoras que se están llevando a cabo destacan la impermeabilización de la cubierta de la piscina del barrio de Santa María de Benquerencia, la limpieza de los lucernarios en la piscina del Salto del Caballo y la reparación del vaso grande de la piscina del Casco Histórico. Estas acciones buscan garantizar que las instalaciones se mantengan en óptimas condiciones tanto para la temporada actual como para las próximas.
En resumen, la temporada de verano en las piscinas municipales de Toledo ha comenzado de manera tranquila, con un ligero descenso en la venta de entradas individuales pero un aumento en la venta de abonos. La seguridad y el mantenimiento de las instalaciones son prioridades para el Ayuntamiento, que se encuentra trabajando para garantizar la satisfacción de los usuarios durante todo el verano.
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