El CD Salesianos Puertollano ha dado un paso significativo hacia el futuro con el lanzamiento de un nuevo proyecto que promete revitalizar el fútbol sala femenino en la localidad. Tras una importante reestructuración de su equipo y cuerpo técnico, el club se encuentra en un punto de inflexión después de la salida del entrenador Jaime García y de diversas jugadoras clave que habían sido fundamentales en el éxito reciente del equipo.
Este cambio, aunque nostálgico, se percibe como una evolución necesaria para romper con las dinámicas negativas que habían afectado al rendimiento del equipo en temporadas anteriores. La llegada del técnico Óscar Horna, acompañado por Sara Merino, introduce un enfoque renovado que busca infundir nueva energía y motivación al grupo.
Durante la pretemporada, el club se ha enfrascado en un intenso periodo de actividad, donde no solo se han realizado incorporaciones, sino que también se han renovado contratos con jugadoras que aportarán calidad y experiencia al equipo. Las nuevas adquisiciones incluyen talentos no solo nacionales, sino también internacionales, lo que plantea un horizonte prometedor y un notable potencial de crecimiento para la escuadra.
Con el sueño del ascenso a la primera división en el horizonte, la ambición del CD Salesianos es palpable. La dirección del club ha comunicado claramente su intención de alcanzar los playoffs de ascenso, un objetivo que, con el talento recién incorporado y la pasión de una afición leal, parece cada vez más alcanzable.
La gestión acertada de la directiva, junto con el renovado apoyo de la afición, ha generado un clima de optimismo en torno al club. El CD Salesianos Puertollano se perfila como un competidor formidable en la próxima temporada y está decidido a dejar una huella significativa en el panorama del fútbol sala femenino, demostrando que la reestructura, aunque desafiante, puede ser una senda hacia un futuro brillante y exitoso.
