Uno de los principales caprichos que podemos permitirnos, siempre y cuando tengamos espacio en casa, es instalar una piscina en nuestro jardín que poder disfrutar en verano para refrescarnos. Hay que reconocer que el calor se lleva mucho mejor si tenemos la opción de darnos un chapuzón siempre que queramos. Además, si hay niños en casa, seguro que la piscina nos ayudará a que sus vacaciones de verano no sean tan aburridas. Ahora bien, el principal problema que nos podemos encontrar es su fabricación, pero gracias a las piscinas prefabricadas este proceso resulta mucho más sencillo y rápido.
Ventajas de las piscinas prefabricadas
Aunque haya muchas personas que piensen que las piscinas de obra son mejores que las piscinas prefabricadas, a la hora de la verdad esto no es así. Estas últimas ofrecen interesantes ventajas que las otras no ofrecen. Veamos cuales son las principales ventajas de este tipo de piscinas.
Economicas
Una de sus principales ventajas es que son mucho más baratas de instalar que las de obra. En parte debido a que su instalación requiere de menos mano de obra y el uso de un menor número de materiales.
Fáciles y rápidas de instalar
Una ventaja muy a tener en cuenta ya que la mayoría de las personas quieren disfrutar de la piscina lo antes posible para poder empezar a disfrutarla. Mientras que una piscina de obra puede tardar en estar lista varias semanas, una prefabricada tardía en estar lista 5 o 6 días.
Piscinas muy duraderas
Este tipo de piscinas, si se instalan de forma adecuada, ofrecen un nivel de vida muy prolongado, más aún si se realiza el mantenimiento adecuado siempre que sea necesario.
¿Cómo instalar una piscina prefabricada?
Aunque hemos comentado que su instalación es muy sencilla, lo más importante de todo es contar con el apoyo de profesionales que se encarguen de todo el proceso y que nos ofrezcan la mejor de las garantías. Dicho esto, lo primero de todo será elegir el tipo de piscina, forma y dimensiones que queremos. Hecha la elección, el siguiente paso sería realizar una excavación adecuada para las dimensiones de la piscina elegida. Es importante que el hueco sea lo más preciso posible para que la piscina no se quede hundida en exceso. También es importante excavar una zona para instalar los sistemas de depuración.
En el fondo de la excavación, habría que realizar una cimentación de hormigón con una pequeña pendiente para el desagüe. Con esta cimentación lo que se busca es que la piscina asiente sobre una base uniforme.
Tras colocar la piscina en el hueco, proceso que hay que hacer con cuidado de que no se dañen las paredes, habrás que rellenar el hueco que queda entre la piscina y el agujero con cemento. Antes de esto, es recomendable comprobar que la pendiente es la adecuada llenándola con un poco de agua.
Una vez ubicada, solo quedaría instalar la depuradora y conectarla a la piscina antes de proceder a su llenado.
¿Os gustaría a vosotros poder disfrutar de una piscina en casa? No lo dudéis y apostar por las prefabricadas. En muy poco tiempo podrás tenerla instalada.