Ripple’s XRP ha alcanzado una destacada posición en el mercado de criptomonedas, superando a Solana (SOL) y Tether (USDT) en términos de capitalización de mercado, lo que lo consolida como el tercer mayor criptoactivo. Este notable avance se ha producido en un contexto de creciente optimismo tras la victoria electoral de Donald Trump en 2024, un evento que ha sido interpretado como un signo positivo para el entorno regulatorio de las criptomonedas en Estados Unidos.
El token XRP logró un nuevo máximo el 2 de diciembre de 2024 al alcanzar un precio de $2.46 antes de estabilizarse en $2.29. Los analistas apuntan que este aumento se debe al favorable ambiente político, junto con las expectativas en torno al proyecto de stablecoin de Ripple, denominado RLUSD. Estas señales indican un posible crecimiento sostenible para XRP en los próximos meses.
La elección de Donald Trump ha traído consigo un rally significativo en el mercado, liderado inicialmente por Bitcoin, que experimentó un máximo histórico de $99,645. En este contexto, XRP también se benefició, con un salto del 17% el 15 de noviembre, impulsado por rumores de un encuentro entre el CEO de Ripple, Brad Garlinghouse, y Trump. Aunque la reunión no ha sido confirmada, la especulación acerca de una relación entre Ripple y la nueva administración ha alimentado la confianza de los inversores.
Además, la posibilidad de una pronta resolución en la disputa legal entre Ripple y la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. (SEC) ha añadido un bocado de optimismo al mercado. Joe Lubin, CEO de Consensys, ha sugerido que bajo el nuevo gobierno, varios casos regulatorios podrían ser desestimados, lo cual respalda la creciente confianza en XRP. Apoyos de figuras influyentes, como el exjefe de la CFTC, Chris Giancarlo, contribuyen a este clima favorable.
Por otro lado, el desarrollo del RLUSD, un stablecoin sobrecolateralizado, también juega un papel crucial en el crecimiento de XRP. Informes recientes indican que el Departamento de Servicios Financieros de Nueva York (NYDFS) está cerca de aprobar el proyecto, que se espera esté disponible el 4 de diciembre. La integración de RLUSD con XRP se perfila como una innovación clave destinada a mejorar los servicios de pagos transfronterizos, reforzando aún más la posición de Ripple en el ecosistema financiero.
Esta combinación de factores políticos y proyectos innovadores sugiere que XRP podría estar en el umbral de un periodo de crecimiento significativo, capturando la atención de inversores y analistas por igual en un mercado cada vez más dinámico.
