La pedanía de San Benito, en Ciudad Real, ha decidido mantener abierta su sección del Centro Rural Agrupado (CRA) a pesar de contar únicamente con tres alumnos. Esta medida ha sido recibida con alivio por las familias, quienes evitarán realizar desplazamientos diarios de hasta 40 kilómetros por carreteras a menudo complicadas, especialmente en invierno, cuando la meteorología puede dificultar el trayecto.
El CRA ‘Entre Jaras’ agrupa las secciones de Alamillo, Almadenejos, Guadalmez y San Benito. Mónica Silveria López, madre de uno de los alumnos, ha comentado que para los padres es un «descanso» no tener que lidiar con las peligrosas carreteras que complican los viajes. Ante esta situación, tanto la dirección del centro como los progenitores presentaron una solicitud escrita para asegurar la continuidad de la escuela rural.
Uno de los estudiantes, Miguel, ha expresado que mantener el colegio en el pueblo es lo «mejor» para la comunidad, ya que facilita la vida diaria de las familias, quienes solo deben madrugar «media hora antes». Alicia, otra de las alumnas, también ha compartido su agrado por tener el colegio cerca, aunque ha mostrado cierta reticencia a regresar a las aulas.
Aurora Moreno, directora del CRA, ha destacado la relevancia de esta apertura y ha agradecido el apoyo del Gobierno regional. Según ha señalado, la convivencia de niños de diferentes niveles educativos, como primero, cuarto y sexto de Educación Primaria, no es un inconveniente, sino una oportunidad para ofrecer una atención más individualizada. Moreno ha señalado que, al ser un grupo pequeño, todos los maestros pueden atender a cada uno de los niños de manera más eficaz, además de fomentar un ambiente de aprendizaje en el que los mayores pueden ayudar a los más pequeños.
La directora ha enfatizado que, a pesar de su número reducido de alumnos, la escuela no está aislada y sigue implementando las mismas metodologías y proyectos que el resto de secciones del CRA, incluyendo la innovación y la aplicación de la robótica, para lo cual se disponen de recursos adecuados.
El alcalde pedáneo, Gregorio Ruiz, ha manifestado que la apertura de la escuela es motivo de «alegría» y brinda tranquilidad a las familias al evitar los riesgos del peligroso trayecto por una carretera de montaña, especialmente durante el invierno. «Si no hay colegio, no hay niños; parece que no hay vida», ha valorado.
Por su parte, Blanca Fernández, delegada de la Junta en Ciudad Real, ha expresado su satisfacción por la continuidad de la escuela rural, subrayando la importancia de que los niños del ámbito rural cuenten con las mismas oportunidades que sus homólogos en áreas urbanas, incluyendo el acceso a especialistas y tutores. «Hay cosas en las que no hay que mirar tanto el precio como el valor, y esto tiene mucho», ha afirmado.
Esta decisión de mantener la escuela en San Benito asegura no solo la educación de los niños, sino también la calidad de vida de las familias de la pedanía.
vía: Diario de Castilla-La Mancha
