La Federación de Mujeres y Familias del Ámbito Rural (AMFAR) ha concluido con gran éxito su última edición del Programa Plurirregional de Formación, una iniciativa desarrollada en colaboración con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Este programa anual ha facilitado 46 cursos presenciales, a los que asistieron 763 mujeres rurales de diversas partes de España, consolidándose como una iniciativa fundamental para el desarrollo profesional y personal en el entorno rural.
El interés de las mujeres por mejorar su cualificación en el sector agroalimentario es cada vez más evidente, ya que más del 50% de las participantes tienen entre 25 y 54 años. Este programa, que se llevó a cabo en 13 provincias de 8 comunidades autónomas, ofreció más de 850 horas lectivas en áreas clave como la transformación de productos agroalimentarios, la digitalización, la sostenibilidad ambiental y la salud y calidad alimentaria.
Los cursos de digitalización fueron los más demandados, con 13 acciones formativas. Asimismo, los programas relacionados con la salud y calidad alimentaria, así como aquellos centrados en sistemas respetuosos con el medioambiente, ofrecieron un total de 18 acciones formativas. También se suscitaron grandes intereses en cursos sobre el Plan Estratégico de la PAC (PEPAC), la renovación y obtención del Carnet de Manipulador de Fitosanitarios y el bienestar animal, con especial atención a aquellos dedicados al aprovechamiento de la lana de oveja.
AMFAR, consciente de la diversidad de localidades en las que se encuentra, no se limitó a las áreas más pobladas e hizo llegar su formación a pequeños municipios con escasa densidad de población, como Huélamo (Cuenca) con 75 habitantes y Poveda de la Sierra (Guadalajara) con 113, contribuyendo al desarrollo económico de las zonas afectadas por la despoblación.
Lola Merino, presidenta de AMFAR, subrayó que el objetivo principal del programa es “facilitar la incorporación laboral de las mujeres rurales al sector agroalimentario, además de proporcionarles herramientas para emprender y aprovechar las oportunidades que brinda la digitalización, incluso en las áreas más despobladas de España”.
Desde su fundación, AMFAR ha mantenido una fuerte presencia a nivel nacional, trabajando incansablemente para defender los derechos e intereses de las mujeres rurales. La organización se ha consolidado como un pilar esencial en la promoción del desarrollo sostenible y la competitividad del medio rural, asegurando que cada vez más mujeres tengan acceso a las herramientas necesarias para empoderarse y contribuir al crecimiento de sus comunidades.
