CCOO-Industria y el comité de empresa instan a la dirección de Mission Foods Iberia a aprovechar el diálogo para evitar que el conflicto laboral que se vive de forma permanente en sus centros de producción de Borox (Toledo) se traduzca en la convocatoria de huelgas.
Mission Foods forma parte de la multinacional mexicana Gruma y se dedica a la elaboración de panes planos y productos de harina de maíz típicos mexicanos. Cuenta en Borox con unas 350 personas empleadas en dos factorías, a las que aplica un convenio colectivo, el de Bollería de Madrid, que resulta doblemente impropio, porque no se corresponde ni a su actividad productiva ni a la provincia donde la lleva a cabo.
CCOO lleva desde meses instando a Mission Foods a negociar una regulación laboral adecuada para sus centros de producción de Borox; donde ambas partes ya pudieron resolver el pasado mes de julio, con un acuerdo alcanzado ante el Jurado Arbitral, el conflicto provocado por la aplicación de una doble jornada de trabajo.
Tras aquel acto de mediación, la empresa aceptó abordar también a través del diálogo la cuestión de la regulación convenida de las condiciones de trabajo; para lo que CCOO planteó dos opciones: acogerse al convenio de Panaderías de Toledo, negociando y acordando las adecuaciones que fueran precisas; o bien entablar la negociación de un convenio propio.
Mission Foods se comprometió entonces a abrir negociaciones antes de finalizar el mes de septiembre, pero el plazo venció sin que la empresa diera ningún paso para hacer realidad su compromiso.
Ante el silencio de la empresa, CCOO-Industria y los representantes sindicales de la plantilla -todos ellos, de CCOO- celebraron asambleas durante varios días y en diferentes horarios; en las que se acordó dar diez días más de plazo a Mission Food antes de solicitar mediación previa a la convocatoria de huelga.
La semana pasada, la empresa concretó finalmente una reunión, que tendrá lugar mañana por la tarde.
“Mantenemos nuestras propuestas sobre cómo podemos regular las condiciones laborales en los centros de trabajo de Mission Foods en Borox, pero estamos abiertos a escuchar cualquier alternativa que nos plantee la empresa”, señala Jesús Roldán, secretario de Organización de CCOO-Industria de Toledo. “Pero lo que es imprescindible y cada vez más urgente es poner fin a la situación tan irregular que se vive allí por la aplicación de un convenio impropio, un convenio de otra provincia y de otro sector. Y queremos hacerlo prioritariamente mediante la negociación y el acuerdo; ni CCOO ni los trabajadores queremos el conflicto. Pero esto no se puede prolongar eternamente; si hay que ir a la huelga, iremos a la huelga”
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